miércoles, 27 de noviembre de 2013

DIPUTADOS CONVIRTIÓ EN LEY LAS PENSIONES PARA EX PRESOS POLÍTICOS

El proyecto, impulsado por el kirchnerismo, se aprobó por amplia mayoría; establece pensiones graciables para todas las víctimas de detenciones políticas hasta 1983.

Diputados aprobó esta tarde los cambios introducidos por el Senado. Foto: Archivo
La Cámara de Diputados convirtió esta tarde en ley el proyecto que otorga una pensión graciable para las personas que fueron víctimas de detención ilegal por razones de carácter política o sindical hasta el 10 de diciembre de 1983.

Diputado Juan Carlos Diaz Roig
Teléfono: 4127-7100
La propuesta elaborada por el diputado formoseño Juan Carlos Díaz Roig ya tenía la media sanción del Senado y fue aprobada por 176 votos a favor, 2 en contra y una abstención.

MÁS BENEFICIOS PARA EX TERRORISTAS

Editorial I

Un proyecto propicia una pensión vitalicia para quienes fueron detenidos a disposición del PEN entre 1974 y 1983, pese a que ya habían sido indemnizados.
   

Se encuentran próximas a ser sancionadas dos leyes que han sido objeto de una insólita e inexplicable negociación. Por una de ellas, se otorgará una merecida indemnización a los familiares de los soldados y policías muertos durante el ataque montonero al cuartel de Formosa producido el 5 de octubre de 1975, en pleno gobierno de Isabel Perón. Como una absurda contrapartida, por otra ley, se concederá un pago mensual de por vida a quienes fueron detenidos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional entre 1974 y 1983 o a sus herederos, pese a haber recibido ya una indemnización. Debe aclararse que gran parte de ellos fueron detenidos durante los gobiernos constitucionales previos a marzo de 1976 y que varios ocupan actualmente cargos de gobierno.


Dentro de los miles de personas a quienes ahora se propone beneficiar en su calidad de "ex presos políticos" se hallan muchos ex integrantes de organizaciones terroristas, que ya fueron antes indemnizados con una elevada suma fija como víctimas de la represión, por lo que ahora se les suma un nuevo beneficio. Estarán en condiciones de cobrar una pensión mensual igual a la remuneración asignada a la categoría D del escalafón para el personal civil de la administración pública nacional, que duplicaría la jubilación mínima.



martes, 26 de noviembre de 2013

POPULISMO BESTIAL

Por Mauricio Ortín
                                       
Existen por lo menos dos formas de atraco: el ilegal y el legal. En el primer caso la exacción de la propiedad puede llevarse a cabo con éxito o no, si la víctima logra impedirlo. En el atraco legal, en cambio, si el asaltado se resiste al robo el ladrón (el Estado) lo puede mandar preso o enajenarle la propiedad en nombre de la ley y a la vista de todos. La razón que justifica el saqueo legal aduce  que el Estado resulta imprescindible para la vida en sociedad y que, obligación de los ciudadanos, es financiarlo. Ahora bien, no se aclara algo fundamental: el financiar ¿qué, cuánto y cómo? ¿Cuánto debería costarnos el Estado argentino? ¿Cuánto debería gastar la sociedad para mantener al gobierno municipal y al gobierno provincial? En los últimos diez años quienes  generan riqueza entregan al gobierno la mitad de lo que producen; es decir,  la mitad del año  trabajan para ellos mismos  y la otra para el Estado. Y, sin embargo, nunca le alcanza y pide más. Veamos si no. El flamante ministro jefe de Gabinete, Capitanich, anunció que aumentará los impuestos a los bienes suntuarios (autos de alta gama, yates, etcétera). La excusa para hacerlo es la equidad impositiva. Es decir, el ardid intelectualmente deshonesto que suscita el resentimiento y la envidia generalizada, según el cual es injusto que los que más tienen paguen casi lo mismo que los que menos tienen y, por lo tanto, los primeros deberán pagar más. Si de equidad fiscal, y no de saqueo, fuera la intención el ministro lograría el mismo efecto equitativo bajando los impuestos a los que menos tienen. Pero el problema de la economía argentina no pasa porque los ricos paguen más impuestos sino, más bien, porque los manirrotos y tarambanas funcionarios estatales dejen de dilapidar lo que no les pertenece. ¿Cómo se entiende que, al mismo tiempo que se estruja a los contribuyentes con impuestos a “los bienes suntuarios”, se prohíje una ley que asegura a diez mil individuos, por el hecho de habérselos considerado presos políticos, un sueldo mensual de seis mil pesos (ajustables a los salarios de la administración pública)? Hay que considerar, además, que: a) Estos señores ya habían sido jugosamente indemnizados; b) No se discrimina en cuanto al tiempo de detención, pues  el que estuvo una semana cobrará lo mismo que el que estuvo siete años; c) Tampoco se distingue entre los que sufrieron prisión sin tener responsabilidad en delito alguno y los que fueron encarcelados (la mayoría) por asesinar, robar, secuestrar y levantarse en armas contra el gobierno constitucional. ¿Para mantener a los depravados que fusilaron a la hijita del capitán Viola es que Capitanich aumenta los impuestos? Más que una simple iniquidad esto tiene todas las características de  una injusticia envuelta en una burla dentro de un disparate. Luís Labraña, ex montonero y persona digna dijo, al respecto: "no combatimos para dejarle una herencia a nuestros familiares" y "creo que hubo mucha sangre de por medio en ambos bandos y no podemos darnos el lujo, con la crisis que está sufriendo el país, de robar el dinero de los contribuyentes". Martín Caparrós, ex de la misma organización se manifestó en forma parecida. Los 9.998 restantes tienen también su gran oportunidad para rechazar por indigna, ofensiva y capitalista a los seis mil pequeños burgueses pesos (¡Con la honra de un revolucionario no se juega!).

lunes, 25 de noviembre de 2013

LA CORRUPCIÓN EL PEOR DE LOS MALES QUE INVADIÓ ARGENTINA

Los mismos obispos han advertido que el narcotráfico se propaga con la complicidad de ciertos políticos que-agrega este periodista-sujetan la bandera de la corrupción.


Por Leandro Gasco

La corrupción es como uno de esos horrendos monstruos que aparecen en las películas de terror. De a poco fue alzando sus brazos y mostrando sus temibles garras, expandiéndose por toda la Argentina. Es definitivamente la madre de todos los males porque destruye el progreso, la esperanza y cualquier deseo de crecimiento en esta ex república, hoy desajustada a derecho.

Consecuentemente mientras el dinero compra voluntades es enorme la lista de pueblos sumidos en el narcotráfico donde la vida de los habitantes se sume en una pesadilla que nunca termina.

Muchos jóvenes viven en un clima de violencia tal que matan a los policías por encargo como si fuese un trabajo más: barrer la calle o vender caramelos en un kiosco.

El Estado no brilla por su ausencia sino que oscurece el horizonte porque sería el principal cómplice. Los mismos obispos han advertido que el narcotráfico se propaga con la complicidad de ciertos políticos que -agrega este periodista sujetan la bandera de la corrupción.

El matar por encargo, robar para drogarse o encontrar gente asesinada y tirada en las zanjas junto a animales sarnosos, enfermos y desnutridos son parte de ese cementerio al estilo Freddy Krueger en muchos lugares de la Nación .

Es verdad que en la Argentina donde crecen las villas de emergencia también hay gente honesta pero lamentablemente cada vez son más los que han entrado en el fantasma desolador del narcotráfico que les corta piernas y brazos, imposibilitándolos a la hora de tomar decisiones por cuenta propia.

Cientos de jóvenes habitantes de los asentamientos parecen robots sin baterías  y viven de balacera en balacera a cambio de más droga y unos pesos.

La corrupción ha infectado casi todo el país, ha minado toda la geografía, por lo que son muchos los desgraciados ejemplos de la misma, visibles en todos los oficios o profesiones.

Esta enfermedad cruel que busca hacer desaparecer el remedio en extinción de la honestidad ha levantado un paredón con maliciosos ladrillos de progresismo.

Cuando se premia lo incorrecto y cunde el desacertado ejemplo, se favorece la destrucción de una sociedad que en parte está enferma.

Un director de una escuela que arreglaría para sobredimensionar precios con el proveedor pagando más cara la merienda de los chicos, brindándoles productos de desechable calidad y quedándose con el dinero que recibe de un organismo estatal; un hospital público que sobrefacturaría insumos o vendería a privados aparatología o medicamentos que por pertenecer al Estado son de todos.

Diputados y senadores que recibirían altas sumas dinerarias a cambio de votar lo que el Ejecutivo ordena sin medir consecuencias en la población; obreros que trasladarían elementos que son propiedad de la fábrica a sus viviendas particulares para luego revenderlos y hacer un extra; contadores que a cambio de una buena paga arreglarían con la Administración de Ingresos Públicos para disminuir impuestos; abogados que utilizarían estrategias impensadas y se venderían al mejor postor con fines inconfesables; clínicas que serían reductos de la muerte porque entrarían en el negocio de la venta de órganos y mandarían al otro mundo a pacientes que tendrían que colocarse prótesis que otorgarían obras sociales afines a determinado gobierno; funcionarios que pondrían a sus hijos al frente de empresas paralelas que se beneficiarían con negocios millonarios del Estado y/o con otros países donde el populismo está de moda, tanto que en el exterior serían sindicados como testaferros de presidentes sudamericanos; empresas paralelas; negocio de obra pública; vista gorda para las zonas liberadas de droga, crimen y narcotráfico; periodistas que instalarían temas y harían honor al veletismo como deporte nacional, colegas que condenan su prestigio y suicidan su reputación asegurando sin vacilar la veracidad de hechos y situaciones falsas, mandados por organismos de inteligencia, gobiernos u organizaciones no gubernamentales financiadas desde adentro o fuera del país.