Yessy Funes
Era yo apenas una chiquilla de 11
años la mayor de 7 hermanos vivíamos a las orillas del rio Lempa... no sé si
del lado de Chalatenango o de cabañas... lo que sí sé que me quedaba cercano un
pueblo llamado Victoria...
Eran los años '80 y yo comenzaba
a estudiar 5 grado. Una mañana me salió al encuentro un grupo de hombres y
mujeres uniformados me detuvieron y me dijeron que me necesitan para que me
incorpora a la lucha de los pobres... yo ignorante les dije que avisáramos a mi
mamá, me dijeron que otro día regresaríamos. Me llevaron a un campamento
llamado LA CAMPANA ahí había muchos niños y niñas de mi edad a los cuales
entrenaban como usar los fusiles G/3 y a fabricar bombas en latas vacías de
sardina y leche en polvo... pasaron los días y nunca me llevaron donde mi
mamá... con el tiempo me acostumbre. Me lavaron el cerebro los comandantes y la
radio de Nicaragua que escuchábamos todo el tiempo donde se nos enseñó a odiar
a los Ricos Explotadores y los Terratenientes Que explotaban a los
Campesinos... Se nos decía que los soldados eran nuestros enemigos traidores
que luchaban contra nosotros para defender los intereses de la oligarquía...
En esa lucha me hice mujer... me enamoré...
pero no fui correspondida, pues solo tenía que complacer a muchos no había tiempo
para amar, solo para complacer eso era lo primordial...
Pasaron los años terminó la
guerra se firmaron acuerdos de paz...
Y nos prometieron tierras,
seguridad y un mejor vivir
Han pasado los años y la ansiada
ayuda nunca llegó...
Entregué mi niñez, mi juventud,
mis sueños e ilusiones... arrebatada. Y hoy aquellos comandantes a quienes les serví
mi ingenuidad ahora los veo de lejos con guardaespaldas, adinerados... Ya no se
acuerdan de quienes les quitamos el frío en aquellos montes, Ahora son ricos. Aquellos
que un día nos dijeron que odiáramos a los Ricos Explotadores...
HOY solo me queda frustración y
los recuerdos de mi familia con quien pude haber crecido y haber realizado mi
vida junto a un buen esposo...
Soy Maribel vivo sola, arruinada,
con sordera y no tengo nadie quien responda por mí. Solo sé que fui “Obligatoriamente una HIJA DE LA GUERRA”.
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