sábado, 20 de julio de 2019

MÁS VALE TARDE QUE NUNCA


MÁS VALE TARDE QUE NUNCA debería ser el título de la nota de Francisco Olivera en La Nación. El Foro de San Pablo se encuentra vigente en la región desde 1990.

El Foro de Sao Paulo, nacido de la fusión de las fuerzas de izquierda del continente tras la Guerra Fría, ha tenido mucha influencia en todas las políticas populistas/neocomunistas que se instalaron en la región. Han tenido influencia porque, de hecho, los gobiernos han ido cayendo uno a uno en manos de partidos que estaban en manos del Foro de San Pablo. Primero fue Chávez, en Venezuela, aunque antes había caído Cuba en manos comunistas, y luego fueron cayendo uno todos los países, incluso Argentina, Brasil y Uruguay. Sus objetivos principales era la destrucción de las instituciones, especialmente la Fuerzas Armadas, para alzarse con el poder e instalar gobiernos socialistas/neocomunistas en Latinoamérica.

El 19 y 20 de agosto de 2014 se llevo a cabo en la Ciudad de Buenos Aires, el FORO DE BUENOS AIRES, por la Justicia, la Concordia y la Libertad, organizado por la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia. Participaron personalidades Iberoamericanas en este importante encuentro. En esas jornadas se plantearon todos los peligros a la democracia que representaban el Foro de San Pablo,  Populismo, Neocomunismo y el Socialismo del Siglo XXI, cuyos efectos se pueden apreciar hoy en la desgracia venezolana.

Damos un gran bienvenida a esa iniciativa del presidente Jair Bolsonaro y esperamos que el próximo gobierno argentino comprenda la urgente necesidad de sancionar una ley de Pacificación y Concordia Nacional, que permita cerrar definitivamente las cicatrices de la guerra civil de los años '70, recuperar nuestras Fuerzas Armadas del estado de destrucción en el que se encuentran y entre todos asegurar un futuro basado en la libertad y democracia.

Para quienes ignoran o dudan del peligro del Foro de San Pablo, los invitamos a ver el video: Las fases del neocomunismo o socialismo del siglo XXI Los gobiernos del Foro de Sao Paulo.




ALIADOS CONTRA EL FORO DE SAN PABLO

Francisco Olivera








Bolsonaro es como Trump: difícil que rompa el silencio sin provocar. Su paso por la 54a Cumbre del Mercosur, que se hizo esta semana en Santa Fe, fue protocolar solo en público. En privado, delante de funcionarios argentinos que volvieron en esta visita a constatar su respaldo a la reelección de Macri, deslizó una pretensión que excede el bloque regional y sus acuerdos: hay que empezar a pensar en un "anti-Foro de San Pablo". La idea no cayó mal entre los asistentes. Al contrario: Mario Abdo Benítez, presidente paraguayo, se ofreció a colaborar: "Podríamos hacerlo en Paraguay", propuso.

Cambió el viento. Siempre hay alguna convocatoria contracultural. En 2005, mientras transcurría en el Hotel Provincial la IV Cumbre de las Américas con George W. Bush, se hizo en el estadio mundialista de Mar del Plata. Se llamó III Cumbre de los Pueblos y fue multitudinaria: la organizó Chávez con el apoyo de Néstor Kirchner. "No a Bush y no al ALCA" era la consigna. "Si viene, yo paro", decía un volante de la CTA que mostraba la cara del presidente norteamericano.

Ahora es solo una postal de esos años. Y apenas un recuerdo para Evo Morales, presente entonces como candidato a la presidencia de Bolivia y participante esta semana como jefe de Estado en Santa Fe. "Se lo vio sonriente: él quiere pertenecer al Mercosur", dijeron en el macrismo. Si prosperan las propuestas de Bolsonaro, el líder boliviano deberá hacer equilibrio. Su partido, el MAS, es miembro del Foro de San Pablo, que se reunió por última vez en 2018 en La Habana. Esa cumbre paulista es desde hace casi 30 años un think tank regional de la izquierda. Nació en 1990, un año después de la caída del Muro de Berlín, impulsada por el PT, el partido de Lula. En 2010 se hizo por única vez en Buenos Aires y tuvo a Cristina Kirchner como oradora en la clausura. En 1996, en San Salvador, llegó a participar Raúl Reyes, miembro de las FARC, que leyó un mensaje de su comandante en jefe, Manuel Marulanda.

Bolsonaro está dispuesto a encabezar ahora una reacción conservadora. En Santa Fe enumeró algunas condiciones que deberían darse. Una de ellas parece de índole personal: que se acepte la postulación de su hijo Eduardo como embajador en Estados Unidos. No es sencillo, porque la tradición del Palacio de Itamaraty indica, al contrario de lo que ocurre en la Argentina, que esos cargos no se reservan a políticos, sino a diplomáticos de carrera.

Eduardo, un abogado de 35 años, es diputado por el estado de San Pablo. Llegó a la cámara en 2015 con 1.814.443 sufragios que lo convirtieron en el legislador más votado en la historia de Brasil. Tiene una buena relación con los hijos de Trump y con Jared Kushner, el influyente yerno del líder republicano, y les cae bien a los macristas. En mayo, invitado al Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales a dar lo que en el mundo académico se conoce como clase magistral -método docente unidireccional sin preguntas de los asistentes-, dijo que este era un país al que le tenía afecto y en el que, de joven, había llegado a ganarse la vida como guía turístico y coordinador de viajes de egresados a Bariloche. Su exposición arrancó con una foto de Karl Marx y una enumeración: Cristina Kirchner, Lula, Chávez, Evo Morales, Mujica y Rafael Correa. "El marxismo no es una ideología. Es un movimiento que va cambiando de nombres: a veces es socialismo, otras progresismo, otras bolivarismo, y siempre el discurso se va acomodando", dijo.

El gobierno argentino está dispuesto a respaldar esa designación, que debe ser aprobada por el Parlamento. "Es un hombre latinoamericanista y con una visión clara de las relaciones de nuestra región con Estados Unidos. Puede sumarnos a todos", lo definió esta semana el canciller Jorge Faurie. Esta devolución de gestos -la Casa Rosada le agradece a Bolsonaro su rol en el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur- exhibe a la vez el eje global a que la Argentina busca pertenecer. El decreto que permite incluir a Hezbollah entre las organizaciones terroristas que el Gobierno acaba de publicar fue un pedido de la Casa Blanca que hasta llegó a generar dudas en la Cancillería: Faurie habría preferido seguir con la lista aprobada en el Consejo de Seguridad de la ONU. En realidad, el más convencido de la iniciativa, que estaba prevista inicialmente en un proyecto de ley del diputado Luis Petri y después se apuró en un decreto, era el propio Macri. John Bolton, consejero de Seguridad Nacional norteamericano, lo celebró ayer en su cuenta de Twitter, al señalar que Estados Unidos "aplaude" la decisión argentina de declarar a Hezbollah, que responde a Irán, organización terrorista. "Continuaremos con los esfuerzos conjuntos para cortar las finanzas de Hezbollah y la capacidad de Irán de planear ataques terroristas. Es hora de apagar las luces en el llamado 'Partido de Dios'", afirma el mensaje.

Macri confía en que esa medida y el congelamiento que la UIF les aplicó a los activos de la organización contribuyan a evitar más muertes. Así lo dijo anteayer, durante la presentación del libro Justicia perseguirás, sobre los 25 años del atentado contra la AMIA, en el Museo de la Casa Rosada, donde recibió el aplauso de un público conformado por parientes de las víctimas y empresarios como Eduardo Elsztain (IRSA) y Adrián Werthein, presidente del Congreso Judío Latinoamericano. "A mí no me asusta la grieta: estamos en el camino correcto", dijo Werthein luego de compendiar los enfrentamientos ideológicos argentinos de la historia.

El rumbo elegido incluye un horizonte económico que Macri juzga como única alternativa de viabilidad para el país. Ahí coincide más con Paulo Guedes, ministro de Economía brasileño, que con Bolsonaro. Guedes presentó esta semana su proyecto de reforma previsional como el camino que deberá seguir la Argentina. "La proximidad de Macri y Bolsonaro encaja muy bien con esta visión de modernización de las economías. Si alguno de los dos no siguiera no sería posible esta reforma", dijo en una entrevista con El Cronista. Horas después fue el presidente brasileño el que se lo dijo a los funcionarios argentinos: "Ustedes no pueden volver atrás".

El fondo del asunto trasciende en realidad las relaciones personales: es una cruzada ideológica que, como Trump, Bolsonaro predica hasta en Twitter. El mes pasado hablaba de Cuba y escribió en su cuenta: "Sin el Foro de San Pablo, el país comunista habría entrado en colapso hace mucho tiempo. 'El socialismo dura hasta que se termina el dinero de los demás'. Margaret Thatcher". Inoportuna al gusto argentino, la cita pretendió describir lo que ha ocurrido en la región. Hace 15 años, con los términos de intercambio más favorables en décadas, a ningún candidato le habría molestado que lo llamaran, como Pichetto a Kicillof, marxista. "Soy peronista y keynesiano", se defendió el involucrado.

En política no hay dogmas: es el contexto lo que determina qué es elogio o insulto. Habrá que admitirle al compañero de fórmula de Macri una destreza: sus adjetivos describen climas de época.

Por: Francisco Olivera

viernes, 19 de julio de 2019

EL EPISCOPADO ARGENTINO Y LA GRIETA (I)

Oscar Ojea, presidente del Episcopado y hombre cercano al Papa


(9) Porque en la boca de ellos no hay sinceridad; Sus entrañas son maldad, Sepulcro abierto es su garganta, con su lengua hablan lisonjas (10) Castígalos, oh Dios; Caigan por sus mismos consejos; Por la multitud de sus transgresiones échalos fuera, Porque se rebelaron contra ti.
Salmo 5,   9-10

No importa, en cuanto se habla de grieta, manejar números. Más o menos perseguidos de un lado o del otro no hace a la cuestión, porque una grieta se produce en la sociedad, cada vez que la mentira, la injusticia y la venganza se convierten en los patrones del pensamiento de aquellos que, por su ubicación política, religiosa o social, son referentes de la misma.

Independientemente de cuanto haya decaído la Iglesia Católica en la Argentina es exacto decir que los obispos son aún personas de influencia en los círculos políticos y sociales argentinos, aunque cada vez sean menos tenidos en cuenta por aquellos que en algún momento fueron su verdadero rebaño, su palabra todavía es escuchada y su preocupación por el abismo que divide a la sociedad argentina- al menos de palabra- es para muchos, meritoria.

Sin embargo, en consonancia con la hipocresía flagrante de la que hacen gala desde hace años los administradores diocesanos de la institución- que no Pastores de la Iglesia Católica- han elegido no cerrar la grieta. En verdad, sea por “corrección política”, por cobardía o por simple compromiso ideológico, han optado por pararse de un lado del abismo viendo con inocultable desdén el dolor, el abandono y la muerte que hay en el otro lado del mismo.

Seamos, aunque duela, sinceros. A ninguno de los administradores diocesanos que de alguna manera tienen relación con la Argentina; ni al de Roma ni a la mayoría de los que se mueven por estas tristes Provincias Unidas del Sur, les interesa la verdad; solo corren detrás de una efímera ganancia política, o de un espurio reconocimiento por parte de  los que han hecho de la muerte y su usufructo un trueque siniestro y tramposo.

Enrique Angelelli

Aunque estas actitudes vienen desde lejos, dos cosas, en lo que va del año,  han terminado de conformar esta afirmación, primero, la beatificación de un administrador diocesano, Enrique Angelelli,  que en los setenta se dedicó con vehemencia a cavar esa grieta.


Porque cabe, ante esta “sacra” tramoya, preguntarse quién miente, ¿Mintió en su momento Monseñor Witte (1) que hizo una profunda investigación de la muerte de Angelelli lo que le permitió decir que había muerto en un accidente y no asesinado?, ¿mintió Monseñor Zaspe cuando dijo en Santa Fe, entre otros a mi padre, que: “el “Pelao” se había matado en un accidente, nunca cuidaba el auto…”?, ¿Mintió Monseñor Giaquinta (2) cuando dijo no existía ninguna evidencia que permitiese concluir que la muerte de Angelelli hubiese sido intencionalmente procurada, más allá de que había muchos que deseaban su muerte? o mienten el Papa y los obispos argentinos más preocupados en hacer una utilización espuria pero “políticamente correcta” de la beatificación de un individuo que, para una parte importante de los católicos argentinos que vivimos esa época, no era otra cosa que un facineroso dedicado a cavar esa grieta que hoy de manera frívola muchos dicen que les preocupa.


No obstante las protestas, incluso dentro del obispado nacional, se salieron con la suya; la Rioja se venía cocinando desde hace tiempo en la salsa beatificadora recetada por el obispo de Roma y un grupo grande de prelados se turnaron ese día como bastoneros de una extravagante ceremonia donde la nota de color la puso un grupo de curas que se dedicaron a insultar con vehemencia propia de carreros a la vicepresidente de la República. De cualquier manera poco interesa una beatificación más en Argentina, en tanto y cuanto estamos en un país donde el Gauchito Gil llena de altares e imágenes las rutas mientras la Difunta Correa mira con tristeza los lugares perdidos.


Poco importa que movidos por una rastrera decisión política la iglesia argentina haya beatificado a ese sujeto; lo que verdaderamente duele es que lo hayan declarado “mártir de la fe” y aunque la pregunta obligada sea ¿de qué fe?, es aquí donde se deja ver la pérfida y sesgada mojigatería del episcopado nacional que supone desasosegadamente que en esa época hubo un solo mártir y este, estaba del lado de aquellos que asaltaron la república en pleno gobierno democrático, ponían bombas y asesinaban a cualquier policía que estaba de facción para hacerse de sus armas.

Carlos Alberto Sacheri

Es muy difícil tratar de convencer a obispos, secuaces et als que en esa época sobraron argentinos que por su compromiso con la Iglesia, con la vida y por las características de sus muertes- martirios verdaderos- tenían muchos más derecho que este capellán de forajidos para ser declarados Mártires de la Fe. Nombremos solo a dos, haciendo hincapié en el hecho que estos dos mártires jamás empuñaron un arma ni, menos aún, sostuvieron que el camino era la violencia: Carlos Alberto Sacheri y Jordán Bruno Genta hombres de paz y verdad que  brillan por su martirio con luz propia ya que fueron fieles a la exhortación de san Pablo, y dieron la buena batalla “guardando la fe y una buena conciencia…” (1 Timoteo 1:19).  Asesinados un domingo después de comulgar, estos cristianos inmolados en una guerra sucia y cruel solo  recibieron de obispos y cardenales el olvido como oración. (3)

Jordán Bruno Genta

A los pocos días de la “beatificación” que hemos relatado, la CEA nos regala una muestra más de cuan oblicua es la mirada con que ellos escrutan la realidad argentina y su historia reciente. Que su apresuramiento “políticamente correcto” les haya jugado una mala pasada no les ha evitado embarrarse en la charca de otro papelón monumental. (4)

En consonancia con la aparición de un nuevo “nieto” la Conferencia Episcopal Argentina envió una salutación a la “orga” Abuelas de Plaza de Mayo en la que les daban gracias por el servicio en nuestra Patria “a la reconstrucción de la historia y al encuentro con la verdad que sana". ¿Nadie les dijo que con ese tema tienen que manejarse con pies de plomo?, ¿nadie que los quiera bien fue capaz de decirles que desde 2009 el Banco de Datos Genéticos esta sospechado de manipulaciones punibles? (5) (6), ¿en que lugar del planeta vivían cuando todos los argentinos sabían que la presidente de “abuelas” estaba implicada en una persecución infame a los hijos de la Sra. de Noble?

Sobre esta piedra edificaré mi Iglesia

Esta es la realidad de nuestro “episcopado”; han descubierto que es más fácil no hacerse problemas y darle, a cada quien lo pida, una iglesia a medida que sostener, con fuerza y Fe la Doctrina.  Son ellos quienes se han quitado, por falta de voluntad, por deformación ideológica o simplemente por temor, el báculo de la autoridad- porque el pastor no solo ama sus ovejas también sabe ordenar sus tiempos de pasto y sueño- y han entregado a los lobos el rebaño negándose a ver que llegará el momento en que se acusará, no solo a ellos sino a todos los católicos, de estos desatinos; anatema que no caerá sobre un cura del sur o uno de Santiago del Estero, ni, menos aún sobre el obispo tal o cual; será, como siempre, en la generalización estúpidamente simple pero efectiva que los enemigos de la Iglesia hacen, que solo Ella es culpable y que solo de Ella provienen todos los males que al hombre le afligen desde que, en Cesárea de Filipo, Nuestro Señor Jesucristo le dijo a Simón Bar Jonás: “Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Infierno no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos”.

José Luis Milia


1.- monseñor Bernardo Witte OMI, sucedió a Angelelli como obispo de La Rioja (1977-1995), luego del interregno de mons. Rubiolo como administrador apostólico de la diócesis. Aún a riesgo de su integridad, investigó la muerte de Angelelli, pero también las de Murias, Longeville y Pedernera y fue quien hizo pública la denuncia de que estos tres habían sido asesinados.

2.- Monseñor Carmelo Giaquinta, arzobispo de Resistencia (22/03/1993 – 01/04/2005). En 2006 la Conferencia Episcopal Argentina le encomendó a Mons. Carmelo Giaquinta, una nueva investigación sobre la muerte de Mons. Angelelli.

3.- A los pocos días de ser asesinados Sacheri y Genta, sus familiares y amigos recibieron la siuiente esquela firmada por el Ejército Revolucionario del Pueblo “22 de Agosto”: “Nos dirigimos a Ud. con la confianza que nos dan los dos contactos mantenidos… en las personas de los queridísimos aunque extintos profesores Jordán Bruno Genta y Carlos Alberto Sacheri… Enterados de la ferviente devoción que los extintos profesaban a Cristo Rey, de quien se decían infatigables soldados, nuestra comunidad ha esperado las festividades de Cristo Rey según el antiguo y el nuevo ‘ordo missae’ y ha permitido que los nombrados comulgaran del dulce cuerpo de su Salvador para que pudieran reunirse con Él en la gloria, puesto que en este Valle de Lágrimas eran depositarios de la Santa Eucaristía…”

4.- La historia del nieto recuperado 130: su padre era miembro de la inteligencia naval. www.clarin.com.ar.

5.- Comprueban irregularidades en el Banco de Datos Genéticos del Hospital Durand. Clarín 22/10/2009

6.- Desaparecidos: denuncian el riesgo de manipular las muestras de ADN. Jorge Lanata, “periodismo para todos” 22/09/2013.  Clarín 23/09/2013

Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini tuo da gloriam.

jueves, 18 de julio de 2019

ESCANDALOSAS INDEMNIZACIONES

Se impone realizar una profunda auditoría para identificar los casos fraudulentos beneficiados por las denominadas "leyes reparatorias"


El 5 de octubre de 1975, un comando fuertemente armado de Montoneros atacó el Regimiento de Infantería de Monte 29 de Formosa: asesinó a diez conscriptos, un agente de policía, un suboficial y un oficial del Ejército Argentino, e hirió a muchos otros. Trece fueron los guerrilleros que cayeron muertos en ese combate con amplísima difusión en los medios y calificado como "victoria del ejército montonero" en las publicaciones de la organización subversiva.

Jovina Luna

Una reciente denuncia penal formulada por Jovina Luna, hermana del soldado Hermindo Luna, uno de los caídos heroicamente en la defensa del cuartel, y Rogelio Mazacotte, conscripto herido en el enfrentamiento, revela escandalosos casos de indemnizaciones fraudulentas pagadas con el dinero de todos los argentinos. Basada en sólidas publicaciones periodísticas, la denuncia demuestra que los familiares de por lo menos nueve de los 13 terroristas abatidos por los defensores del cuartel han recibido cuantiosas indemnizaciones a través de la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia durante anteriores administraciones.

Los terroristas fueron incluidos en la ley "reparatoria" 24.411, indemnizatoria de hechos de "desaparición forzada o fallecidos por el accionar del terrorismo de Estado". Numerosas constancias documentales -entre las que se encuentran actuaciones judiciales, muestras fotográficas y una gran cantidad de publicaciones incluso de la propia organización terrorista demuestran que ninguno de los casos indemnizados responde a esas categorías. Aun así, fueron registrados como tales y tramitados los expedientes en aquella Secretaría de Estado. Sus familiares cobraron indemnizaciones que, a valores actualizados por caso, arrojan un promedio de más de siete millones de pesos, siendo que para algunos la cifra llega a los nueve millones y medio de pesos. Paradójicamente, no solo recibieron buena paga por su acción criminal, sino que además sus nombres están inscriptos entre aquellos homenajeados en el Parque de la Memoria de la ciudad de Buenos Aires.


Desgraciadamente, no son estos los únicos casos de indemnizaciones fraudulentas pagadas al amparo de leyes que dan pie a una gran cantidad de injusticias, además de generar un vergonzoso dispendio del erario. La detallada investigación realizada por el periodista José D'Angelo en su obra Mentirás tus muertos. Falsedades y millones detrás del mito de los 30.000 desaparecidos analiza varios casos más, tanto de guerrilleros abatidos en enfrentamientos con el Ejército o la policía como de desaparecidos que no son tales; de asesinatos cometidos por el ERP o Montoneros en ejecuciones de sus propios miembros, acusados de "traición, deserción" y otros "delitos" de la "justicia revolucionaria" para "disciplinar" a sus integrantes, todos ellos, no obstante, indemnizados por el Estado argentino como víctimas de la represión ilegal. En algunos casos, como el autor ha documentado profusamente, los mismos sujetos que aparecen como asesinados murieron en realidad 30 años después de muerte natural o en otras circunstancias, todo lo cual constituye una tergiversación de los hechos claramente dirigidos a defraudar las arcas del Estado en sumas millonarias. Los ciudadanos aún desconocemos las cifras exactas que se abonaron.

La numerosa cantidad de falaces casos detectados indica que la maniobra no ha sido producto de la acción individual de los causahabientes beneficiados con las indemnizaciones. Se trata de una estructura organizada para la falsificación y gestión de trámites de casos ante el Estado en beneficio de muchos con la necesaria connivencia de funcionarios públicos. La aprobación de los pagos, sabiendo que no correspondían o sin debidamente verificar si se encuadraban o no dentro de las causales señaladas por la ley, revela sospechosas complicidades entre los beneficiados y quienes actuaban desde el poder.

coronel Jorge Roberto Ibarzábal
coronel Argentino del Valle Larrabure

Tanto o más bochornosas e injustificables aun resultan las sumas pagadas en función de otras dos leyes "reparatorias", la 24.043 y 26.564 y sus extensiones administrativas y judiciales, que indemnizan a los "detenidos" víctimas de la acción represiva del Estado: ellas incluyeron a todos aquellos que fueron juzgados y condenados por el Poder Judicial de la Nación. De este modo, con el dinero de todos los argentinos fueron indemnizados los terroristas del ERP que atacaron la Guarnición Militar de Azul en enero de 1974 y dieron muerte al coronel Camilo Arturo Gay y su esposa; los mismos que secuestraron y asesinaron diez meses después en cautiverio al teniente coronel Jorge Roberto Ibarzábal; los autores del copamiento de la Fábrica Militar de Villa María en agosto de ese año, que dieron muerte al cabo de la policía de Córdoba Marcelino Cuello y secuestraron al mayor Argentino del Valle Larrabure. Luego de 372 días alojado en una "cárcel del pueblo", apareció su cadáver con 47 kilos menos y signos de golpes y estrangulamiento. También fueron indemnizados los terroristas autores de la masacre del entonces capitán Viola y su hija, asesinados en Tucumán cuando estacionaba su auto en el que también viajaban su esposa, María Cristina Picón, embarazada de 5 meses, y María Fernanda, de 5 años, quien sufrió graves heridas en la cabeza. Cómo entender que estos y muchos otros terroristas, habiendo sido incluso juzgados y condenados por su violento proceder, fueran indemnizados por estas leyes y sus extensiones.


Se impone, pues, ordenar una profunda auditoría para identificar los casos pagados por los recientes gobiernos que no correspondían ser indemnizados y que el Congreso Nacional deje sin efecto de inmediato las vergonzosas "leyes reparatorias" que han generado tan penosos como aberrantes resultados para evitar que situaciones como las descriptas puedan volver a repetirse.


NOTA: Las imágenes y destacados no corresponden a la nota original.

DEFENSA NACIONAL (QUE EL ÚLTIMO APAGUE LA LUZ)


17/07/2019
                                                                       
Por Mauricio Ortín

Un día de los años 70 el cartero llegó a mi casa. Traía un mensaje esperado. En una cédula se me notificaba que debía presentarme en el Distrito Militar de mi provincia a los efectos de cumplir con el Servicio Militar Obligatorio. Con diez y ocho años recién cumplidos, fui incorporado a las FF.AA. A partir de mi incorporación, quedaba “bajo bandera”; lo que significaba, entre otras cosas, la pérdida de los derechos y garantías que la Constitución Nacional que gozan los civiles. En el cuartel acontecía entonces lo central de mi vida. Allí aprendí que la debida obediencia a los superiores era la virtud por excelencia. Cuando y cuanto dormir, de qué manera vestirse, que comer, donde estar, qué hacer, etc., en síntesis, casi todo, dependía de alguien que no era yo. A la hora de la siesta, mientras mis amigos civiles concurrían (como antes yo) al salón a jugar al billar, el que suscribe con mis compañeros en suerte, aprendíamos a marchar en secciones de Orden cerrado y ¡ay! del que perdiera el paso. No estábamos allí de gusto. Particularmente, extrañaba eso de hacer lo que se daba la real gana. La “colimba” era dura. Sin embargo, ni a mí ni a ninguno se le pasaba ni remotamente por la cabeza denunciar al Jefe de Escuadrón por “privación ilegítima de la libertad” o por “imposición de tormentos” ante un juez federal. Vivíamos esas circunstancias como algo natural que duraba un año y que había que cumplir porque lo establecía una ley.


La instrucción militar consiste, básicamente, en preparar a una persona para ir a la guerra; lo que entraña de algún modo reproducir dicha circunstancia extrema. Ello es así aquí y en cualquier lugar del mundo donde existan fuerzas armadas profesionales. El Jefe del Ejército Rojo y miembro del partido comunista ruso, León Trotsky, afirma en “Mi Vida”: “Sin represalias es imposible poner un ejército en pie. Es una quimera pretender que se van a lanzar a muchedumbres de hombres a la muerte si la pena capital no figura entre las armas de que dispone el mando.” La guerra o la preparación para ella, exige leyes y jueces especiales que tipifiquen los delitos y juzguen las conductas. Y, aún de buena fe, cualquier idea o acción en contrario implica un peligroso riesgo para la defensa nacional. De no entenderse así, el Servicio Militar (por) Obligatorio constituiría un delito en sí mismo y los superiores en el mando, desde el Cabo más moderno hasta el General más antiguo (Don José de San Martín, incluido), criminales de lesa humanidad por ejecutar un Plan Sistemático de violación de los derechos humanos contra los cientos de miles que pasaron por la “colimba”. Un absurdo por donde se lo mire. Ahora bien, no por absurdo, inexistente. La Argentina da para todo. Tal es el caso del procesamiento disparatado, inconstitucional y ridículo de 26 militares que pelearon en Malvinas; a los que se les viola el derecho de ser juzgados por los jueces militares (designados por la ley antes del hecho de la causa) y se los procesa a través de jueces ordinarios con leyes de tiempos de paz.


Según el titular de la Fiscalía General 4 ante la Cámara Federal de Casación Penal, Javier De Luca, “los hechos imputados (imposición de tormentos) son crímenes de guerra y/o graves violaciones a los Derechos Humanos”, por lo tanto, imprescriptibles. De Luca es consciente del escenario de guerra en el que el supuesto crimen se perpetra; de allí que, su mera intervención en un hecho ajeno a su competencia entraña un acto de prevaricación que vuelve nulo el trámite (lo mismo vale para el fiscal Rapoport y el juez Calvete).

Javier De Luca

Poner, retroactivamente, bajo la competencia de la justicia ordinaria hechos que en su momento estaban en la órbita de la justicia militar, además de violar el Art. 18 de la CN, constituye lisa y llanamente propinar un mazazo terminal a las Fuerzas Armadas de la Nación y, si se quiere, por ende un acto de traición al dejar sin defensa al territorio nacional ¿Qué soldado iría a una guerra en esas condiciones? No quiero dar ideas pero, en vista de que se los juzga con el Código Penal, De Luca bien podría acusar a los militares argentinos por matar soldados ingleses. Para la ley penal matar a un inglés es un delito igual de grave que matar a un argentino. Así el soldado Oscar Ismael Poltronieri (Cruz al Heroico Valor en Combate) de, héroe, se convertiría en asesino serial.

soldado Oscar Ismael Poltronieri

En un país medianamente decente estas cosas, por lo general, no pasan. Ahora bien, ninguna sociedad seria está libre de un De Luca. La diferencia es que, dado el caso, los miembros del Congreso harían cola para instalarle una zapatería que lo eyecte del cargo. No es el caso de Argentina Ni un solo candidato a presidente (ni uno) ha dicho media palabra al respecto. Es más, la gobernadora María Eugenia Vidal se presenta como querellante de los 26 militares.


Así las cosas, deberían eliminar ese gasto inútil que representa el Ministerio de Defensa junto a todas sus dependencias (y que el último que salga, apague la luz.)

TERRORISMO


por Giuliano Iezzi


Argentina, en julio de 2019, será sede del Plenario Bianual Internacional para combatir el Terrorismo Nuclear. Así rezan las noticias más recientes, anunciando lo que a todas luces deja al descubierto el total desconocimiento de nuestra realidad por parte de los organizadores y confirma que se tratará de un acto de hipocresía insalvable de parte de nuestros representantes.

El terrorismo nuclear es una sub categoría de la más abarcativa categoría Terrorismo, puesto que el adjetivo Nuclear se refiere al tipo de  armas y no al concepto en sí. Para que se pueda luchar contra el terrorismo la claridad de conceptos es imprescindible, y el accionar debe ser coherente con ellos, evitando subterfugios y parcialidades. En definitiva se debe ser justo y además debe darse por descontado que el país anfitrión comparte la idea fundamental del evento, luchar para evitar el terrorismo; y la Argentina, lamentablemente en su historia reciente, ha dado pruebas de que difícilmente podría ser incluida dentro de los países con reales intenciones compatibles para la lucha.

Desde las convenciones de Ginebra de 1949, en el mundo, los crímenes del terrorismo contra civiles inocentes, se califican como delitos de Lesa Humanidad. En nuestro país desde 1956 forman parte del derecho, pero son ignoradas legal y moralmente.

Lo más patético de la parte de nuestra historia atinente a esta cuestión, es que hasta el 25 de mayo de 1973 el terrorismo había sido derrotado, sus cabecillas juzgados y encarcelados legalmente por La Cámara Federal en lo Penal. Pero en esa fecha se liberó a los terroristas, se disolvió la cámara y a partir de allí los jueces que no se exiliaron fueron asesinados.

Así mismo, parece imposible que la Argentina en definitiva se aplicará a una participación ecuánime y coherente, porque eso determinaría ipso facto una necesaria y justa readecuación a un estado de derecho. Produciéndose como resultado justo y natural, muchas “condenas” y muchas “libertades”; incómodas todas.

Es tan alto el desprecio de todos los acuerdos internacionales, a la cual ha sido inducida a lo largo de cuarenta años, la opinión pública, que una periodista, la señora Liliana Franco, frente a las cámaras de televisión puede declarar, sin problema alguno, que en el living de su casa armaba bombas Molotov, presentando así su “patente de corso”. O recordar que la señora Victoria Donda, quien es Diputada Nacional, expresa a los cuatro vientos y sin temor alguno: “Mis padres mataban con orgullo”. Es menester aclarar que la señora ocupa ese cargo con el único mérito de ser hija de terroristas. O las reiteradas apologías del delito, perpetrados en manifestaciones públicas, por la señora Bonafini, reivindicando el accionar de sus hijos terroristas o haciendo un panegírico de la ETA, y las FARC o brindando con Champagne por el ataque a los civiles de las Torres Gemelas. El estatus de prócer de la Señora Bonafini que le ha sido concedido alegremente por los medios afines al gobierno kirchnerista, le permite a ella, hacer esto y robar “sueños”, sin que sea debidamente juzgada. Comportando asimismo una  condenatoria de la sociedad toda.

Tampoco ayuda el fallo de, Nada menos que la Corte Suprema de Justicia, de 2005, que denegó la extradición a un etarra, sosteniendo que “el terrorismo no es delito de lesa humanidad…”

La Sociedad de las Naciones en 1937 define terrorismo cómo: “Cualquier acto criminal dirigido contra un estado y encaminado a o calculado para crear un estado de terror en las mentes de las personas o del público en general”.

Otra definición plausible agrega: “Forma violenta de lucha política, por la cual se persigue la destrucción del orden establecido o la creación de un clima de terror e inseguridad para intimidar a los adversarios”.

Desde los sesenta en adelante, y muchos tenemos memoria de ello, los terroristas, en la Argentina, no vacilaron en matar y torturar a quien fuera, civiles, niños, militares, o clérigos, para sembrar el terror, motivados por una única razón, destruir el orden y tomar el poder. Como en realidad eran mercenarios cipayos entrenados en Cuba y Rusia, no sería descabellado pensar que luego de hacerse del mando supremo y “fusilar a un millón de personas”, como lo prometieron, en definitiva el gobierno pasase a manos de la potencia más poderosa. Las leyes argentinas contemplaban la pena por terrorismo y el concomitante delito de lesa humanidad, pero en definitiva, los terrorista fueron profusamente indemnizados, y el solo título de guerrillero, y por derecho divino sus descendientes,  hace ya tiempo que es un pase a la política, o a la farándula o al periodismo o a lo que se desee. Es un comodín de uso discrecional. Por otra parte quienes lucharon y derrotaron al terrorismo se pudren en las cárceles, algunos de ellos sin siquiera tener un juicio iniciado, y la mayoría sin una sentencia.

¿Cómo puede ostentar esto la Argentina y ser sede de la bienal?

Si lo apuntado se pudiese endilgar al poder de turno y nada más, no sería tan grave puesto que se trataría de una minoría fácil de contrarrestar. Pero lamentablemente esto sucede a lo largo de más de cuatro décadas y ha permeado todas las instituciones de la enclenque república. Dimensionando  el tamaño del trascendental delito.

Según Umberto Eco, y resumiendo en pocas palabras “…sin periodismo no habría terrorismo…” Y nuestro periodismo de las últimas décadas ha elevado al nivel de héroes a terroristas y a sus deudos e invisibilizado a las víctimas. Tan solo esto es una culpa de tal gravedad que haría inviable la participación de Argentina en ese evento, por lo menos por una cuestión de dignidad.

Para cubrir al terrorismo se ha utilizado el concepto de “terrorismo de estado” y se le ha dado a este una entidad tan superior que el otro terrorismo se diluye en las nieblas del tiempo para los idiotas útiles. Esta falacia no se sostiene frente al mínimo análisis puesto que los Delitos de Lesa Humanidad no son prerrogativas del estado, sino que dependen del hecho en sí. Así que de ninguna manera puede ser omitida la culpa de quienes asesinaron o torturaron a civiles y no civiles, quienes murieron por respetar las leyes vigentes en gobiernos democráticos.

Según el juez Baltazar Garzón, representante de las izquierdas españolas, y por eso vale traerlo a colación, define el concepto como: “Un sistema político cuya regla de reconocimiento permite y/o impone la aplicación clandestina, impredecible y difusa, también a personas manifiestamente inocentes, de medidas coactivas prohibidas por el ordenamiento jurídico proclamado, obstaculiza o anula la actividad judicial y convierte al gobierno en agente activo de la lucha por el poder”.

Desde el gobierno de Alfonsín hasta la fecha esta definición puede ser aplicada a casi todos los gobiernos que se sucedieron, y a la Corte Suprema, puesto que se instrumentó desde el gobierno el “pensamiento único” y quienes opinaban lo contrario fueron escarneados por el terrorismo mediático, o perseguidos por instituciones del estado y hasta soportaron campañas orquestadas por los cómicos ad hoc. Como ejemplo palmario, los Veteranos de Malvinas, debido al intento de venganza y desmilitarización de Argentina, puesto en acto, con todos los poderes del estado, por “el padre de la democracia”, tardaron más de treinta años para ser reconocidos por el pueblo argentino. Con los mismos métodos se han encarcelado, y siguen en la cárcel, a personas sin juicio previo y de “eso no se habla”, cumpliendo a rajatablas el famoso aforisma del general “al enemigo ni justicia”.

El nuevo gobierno asumido hace 18 meses no escapa tampoco a esta definición desde el momento que una ley obliga a contabilizar en 30.000 los desaparecidos aunque nadie pueda dar una lista superior a 8.000.

Asesinando la verdad y la justicia se está asesinando el futuro y en silencio sin disparos, en nuestra Argentina empobrecida, mueren miles de niños inocentes, porque el país es incapaz de cubrirle las mínimas necesidades sanitarias y de alimentos.

No hay manera de luchar contra el terrorismo si se camufla la ley de manera que los terroristas, aun los confesos, salgan libres. Y sean ignorados los acuerdos internacionales sobre concepto y castigo de los delitos de lesa humanidad, por mezquinos y criminales apetitos políticos, como es el caso de nuestro país, nos condenará frente a un mundo arto del terrorismo y definitivamente la no adecuación de nuestro país al derecho internacional pone en duda la realidad de los derechos humanos en Argentina y la esencia misma del concepto de justicia y humanidad.

Giuliano Iezzi
DNI 93.730.882

DEMOCRACIA DEGENERADA

Buenos Aires 16 de julio de 2019

Sr. Director:


La frase que pronunciara Pío XII en su radiomensaje de Navidad de 1944 sobre la democracia política moderna: “… puede haber una ‘genuina y sana democracia’, como forma de gobierno, cuando se respeta a Dios y sus mandamientos, y se practica la solidaridad y fraternidad cristiana. Sin una base moral cristiana, la democracia degenera en formas encubiertas o manifiestas de totalitarismo o de autoritarismo de estado….”, ha pasado a ser en los últimos años, algo así como una frase de cabecera, para todos aquellos que pretendemos que nos gobiernen “como Dios manda”.

En efecto, como cristiano católico que soy no tengo absolutamente ninguna duda que, la democracia en nuestro país está totalmente degenerada, ya que no sólo se ha alejado de los valores y principios cristianos, sino que gran parte de nuestros políticos, ya sea desde el gobierno o desde la oposición, hacen  incontables esfuerzos para imponer en nuestro país leyes “contra natura”, como sería la del aborto o las que surgen de la ideología de género.

Ya en otras cartas nos hemos referido a las estrategias del poder mundial, con la masonería a la cabeza, sobre cómo se ha lanzado en todo el mundo esta campaña satánica para lograr el triunfo de la revolución anticristiana sobre el mundo cristiano y católico. 

Más allá de lo que el poder del dinero o el poder mundial pretendan imponer,  preocupa de sobremanera, la actitud de los argentinos, no sólo de aquellos que están en el gobierno y obedecen a pie juntillas estas órdenes emanadas del poder mundial a cambio de préstamos del FMI, grandes exportaciones o cualquier otro tipo de beneficio económico para el país. También preocupa el ciudadano común de la Patria que no se rebela con energía hacia quienes desde el poder le quieren cambiar su cultura y su escala de valores morales.


Es tanta y tan grande la confusión que vivimos que, en las próximas elecciones los argentinos van a elegir entre los dos candidatos con peor imagen entre todos los candidatos. Uno de ellos fue el primer arrepentido del gobierno anterior, que precisamente era conducido por quien ahora es su compañera de fórmula y a la cual denunció públicamente con acusaciones gravísimas. Además, de la burla que significa que ella, que es la líder convocante, esté procesada en la justicia por un cúmulo de causas de corrupción. El otro candidato, que supuestamente representaba lo opuesto de su antecesora que lo humilló no entregándole formalmente el cargo de presidente de los argentinos, perdió toda su credibilidad con la clase media que lo votó cuando introdujo en el país, por presiones internacionales, la cabeza de playa de la revolución anticristiana al propiciar el aborto y la ideología de género en un pueblo culturalmente católico. Y aunque todo esto parezca una cosa de locos, algo totalmente irracional, desopilante….es la pura realidad argentina. Todo mal, todo al revés…

Existe un mal ya instalado en nuestra sociedad que todo lo deforma, lo trastoca, lo cambia y lo subvierte. La gente va a votar para que la gobierne, a uno de esos dos candidatos con los cuales no está de acuerdo… pero igual los va a votar porque está enceguecida por el sistema que le dice y le repite que así es la democracia, que es lo mejor que nos puede haber pasado… “Democracia o dictadura” sigue siendo el eterno reduccionismo falaz de muchos argentinos.


En el caso de los militares prisioneros de guerra (tal calificativo parte de que uno de los bandos en pugna, los terroristas subversivos, ha decidido continuar la guerra por otros medios y sigue encarcelando arbitrariamente a quienes lo combatieron y vencieron con las armas en los ’70), ocurre el mismo despropósito que con los católicos que votarán por alguno de los dos candidatos abortistas. En efecto, es casi un voto cantado que las FFAA van a votar en primera vuelta por el candidato de las FFAA que defiende el estilo de vida y la cultura cristiano católica, pero en la segunda, seguramente para que no gane el kirchnerismo, votarán por MM, es decir por quien prometió darles la libertad y los sigue manteniendo presos y encima no hizo nada con los terroristas instalados en el poder. Hasta este punto está degenerada nuestra democracia… se vota en contra de los propios intereses...

Pareciera que nuestra sociedad sólo le daría la espalda al sistema votando masivamente contra el mismo, es decir, votando en blanco, impugnando, anulando o no votando, cuando su bolsillo se viese afectado. Todo indica que para gran parte de nuestro pueblo, puestos en la balanza los valores morales y los económicos, estos últimos serían los que la inclinarían a su favor.


Si verdaderamente fuésemos un auténtico pueblo cristiano en su totalidad y se votara por valores y principios, no habría dudas que triunfaría el voto que le daría la espalda al actual sistema y a todos sus políticos. Una síntesis del “que se vayan todos”, para que surjan nuevos líderes que aseguren una democracia ordenada en nuestra tradicional cultura cristiano católica, con una plena participación de los cuerpos intermedios existentes entre la familia y el estado y una auténtica y genuina representatividad.

¡Por Dios y por la Patria!

Hugo Reinaldo Abete
Ex Mayor E.A.

NO SE QUEJE SI NO SE QUEJA



Circular 104

1. Petición de los integrantes de la Promoción 93 del Colegio Militar de la Nación al Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires

Ante la verificación de que en el Parque de la Memoria -sito en la Costanera Norte de la Ciudad de Buenos Aires- se encuentran exhibidas placas en memoria de ex integrantes del ERP que intervinieron en los asesinatos de los entonces capitanes Humberto Antonio Viola y Miguel Alberto Keller, y una hija del primero de ellos, sus compañeros de promoción han presentado una nota al Jefe de Gobierno, solicitando la remoción de las mismas (Ver Petición).

Las personas o instituciones que quieran manifestarse en apoyo o bien adherir al documento mencionado, pueden hacerlo como Comentario al pie de la nota en nuestra página web, o bien por correo electrónico a info@upmac.org.ar, aclarando sus datos personales.

2. Actualización de las Quejas y Denuncias por atención deficiente en el IOSFA

A efectos de completar estudios estadísticos que nos permitan evaluar las deficiencias en la atención de la salud por parte del IOSFA para con sus afiliados, solicitamos a quienes hayan padecido situaciones adversas en los últimos meses, nos hagan llegar sus comentarios.

Nos interesa especialmente:

- Falta de prestadores (o suspensión de servicios por parte de los mismos)
- Falta o excesiva tardanza en la provisión de insumos médicos o farmacéuticos
- Cobro de aranceles adicionales o coseguros no autorizados
- Suspensión de Cirugías programadas por causales del Prestador
- Demora excesiva en el otorgamiento de Turnos para Consultas Médicas, Odontológicas o Kinesiológicas
- Problemas de Internación
- Excesiva demora para recibir reintegros acordados
- Problemas derivados de cierre de farmacias o lugares de atención

Dejar constancia de la fecha y circunstancias del hecho que motiva la queja, y si la misma fue denunciada o no ante las autoridades del IOSFA y en qué forma. Si hubo o no respuesta. Si el hecho provocó algún daño, deterioro de la salud, etc.

Aclarar datos personales y Nro. de Afiliado.

Su participación es de mucha importancia para la defensa de toda la Familia Militar. Agradeceremos dar a la presente la mayor difusión posible.


Buenos Aires,  16 de julio de 2019


Miguel Angel Artuso
Suboficial Mayor (R) FAA
Secretario


Francisco Ricardo Verna
Coronel (R)
Presidente

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