¿Será su Waterloo?

Ayer en la Casa Rosada

Anoche, en un  acto en la Casa Rosada y ante la claque que la acompaña en todas sus actuaciones histriónicas, la presidente y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Cristina Fernández Vda. De Kirchner, desde la trinchera de su atril y con cara de Juana de Arco exclamó: "Mientras yo sea presidenta, se podrán quedar con la Fragata, pero no con la libertad, la dignidad y la soberanía del país", se refería al nuevo fracaso diplomático de su canciller en sus vanos intentos de recuperar la Fragata A.R.A. Libertad retenida por la justicia de Ghana.

De este gran papelón internacional, surgen varias lecciones:

INDEPENDENCIA DE PODERES

La ley por encima del poder

Los poderes públicos deben de gozar de plena autonomía de cada una de ellos en cuanto a otro poder sobre todo el poder ejecutivo y el legislativo que son elegidos por votación directa. Hay un hecho incontrovertible y determinante: si el fuero de Legisladores y Jueces no goza de absoluta autonomía, el sistema político se desnaturaliza y cede el paso a cualesquiera expresiones de totalitarismo.

Pero de nada sirve la legitimidad de origen de los poderes públicos si luego han de someterse a la dominación de otros poderes, grupos o voluntades, a cuyos intereses subordinan sus actuaciones.

Todo acuerdo político, toda elección de cargo, toda asignación de proyecto y toda destinación de recursos ejercida por un poder público deben ser transparentes antes, durante y después de su realización.

La Ley está por encima del poder.

TUVO SU WATERLOO

Napoleón derrotado

Esta antigua frase tiene el significado de destacar el revés del emperador Napoleón en su intento por conquistar Bruselas, sufrió una cruda derrota a manos de las tropas inglesas y prusianas comandadas por el Duque de Wellington.

Wellington, conocedor de la táctica del Emperador, mantuvo el orden de sus posiciones y engañó a Napoleón haciéndole creer que se retiraba. Cayendo en la trampa, la caballería francesa lanzó una carga sin apoyo de infantería, ni artillería. Los ingleses rechazaron fácilmente el ataque francés y obligaron a la caballería a huir en desbandada. Al atardecer, la situación francesa era desesperada, todo intento francés fue en vano, fracasando la última esperanza de Napoleón de romper las líneas aliadas. La infantería francesa fue aniquilada, mientras que la guardia y la caballería hubieron de replegarse.

El fracaso de Waterloo significó el ocaso del Imperio napoleónico y la configuración de un nuevo mapa europeo.

Desde entonces se popularizó la frase “tuvo su Waterloo” para referirse a un fracaso o descalabro  de cualquier especie.

HONRAR LOS COMPROMISOS

Honrar los compromisos

Se entiende habitualmente como un acuerdo entre dos (o más) partes en las que una puede reclamar responsabilidad a la otra para honrar los compromisos.

Con la crisis de diciembre de 2001, la Argentina entró en suspensión de pagos (default) de su deuda externa. Este default ha sido el más largo de la historia financiera moderna, e implica fundamentalmente la cesación de pagos de capital e intereses de los títulos de deuda pública emitidos por el Estado (deuda soberana). A fines de 2004, la deuda externa total alcanzaba los 178.000 millones de dólares. Durante 2003, el gobierno de Néstor Kirchner logró negociar una reprogramación de las obligaciones con los organismos financieros multilaterales (Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo y otros menores) en lo que se llamó el canje de la deuda argentina.

Sin embargo, quedaban aún en default 81.800 millones de dólares en títulos en manos de acreedores privados. En junio de 2004 el gobierno argentino anuncia que la base de negociación para reestructurar los pagos de esa deuda sería una quita del orden del 75%. El 14 de enero de 2005 se lanzó oficialmente la operación de canje de la deuda en default. A cambio de los títulos en mora, el gobierno argentino ofreció tres nuevos bonos, con importantes quitas al capital original e intereses progresivos.

Algunos acreedores aceptaron y otros no. Los principales acreedores de los títulos en mora eran los argentinos, con 38,4% del total. Después se ubican los italianos con el 15,6%, los suizos con el 10,3% y los estadounidenses, con el 9.1%.

Por el enorme monto involucrado, y la cantidad de títulos involucrados (152 bonos distintos emitidos originalmente en dólares, euros, yenes, francos suizos, libras esterlinas y pesos argentinos), se considera que esta es la operación más importante de la historia financiera mundial.

Honrar los compromisos no es otra cosa que pagar la deuda en default y de esa manera la Argentina recuperará parte de su dignidad y consideración internacional.

CONFORMACIÓN DE UN BUEN EQUIPO DE GOBIERNO

Seleccionar a los más capaces e idóneos, no a familiares y amigos

Un gobernante después de ser electo, por muy preparado que este, no puede ejercer la función pública solo, debe contar con un buen equipo de gobierno, en todos sus niveles. El presidente, intendentes, gobernadores, ministros, secretarios, subsecretarios y funcionarios de menor rango, planifican, diseñan y ejecutan políticas públicas en diferentes áreas como: defensa, seguridad, salud, deporte, infraestructura, cultura, servicios públicos, poder ciudadano, entre otros. En este sentido, es importante reflexionar sobre el hecho de que muchos gobernantes cometen el error de nombrar gente de confianza en cargos claves, pensando que eso es suficiente para ejercer el cargo.

En la gerencia pública moderna muchos gobernantes han logrado el éxito en su gestión gracias a tener un equipo de gobierno de primera línea. Sin embargo, muchos fracasos de nuestros gobernantes son el resultado del pésimo equipo de gobierno con el que han trabajado.

La experiencia de los últimos acontecimientos en los órdenes nacional e internacional, son una acabada muestra de impericia, ineptitud, incapacidad, falta de imaginación y exceso de corrupción del equipo de gobierno de la viuda de Kirchner. Nunca en tan poco tiempo se ha caído tan profundo a causa de la ineficacia de la gestión de gobierno.

FINAL

Cae la señora presidente en el error de subestimar la pérdida del Buque Escuela de la Armada Argentina, un juez de Ghana está actuando con independencia, acorde a la ley de su país y acuerdos internacionales, la diplomacia no ha sido una herramienta apta para honrar los compromisos, su equipo de gobierno no posee imaginación para solucionar problemas domésticos y/o internacionales. Perder la Fragata A.R.A. Libertad es ceder nuestra soberanía y dignidad.

Nuestro Gran Almirante Guillermo Brown nos legó una consigna: “Es preferible irse a pique que rendir el pabellón”… comprenderán que Capitán de Navío Pablo Lucio Salonio tiene esa opción y que nadie le podrá reprochar nada. Esta crisis es responsabilidad pura y exclusivamente una consecuencia de la ineptitud política que distingue a este gobierno.

Es probable que esta crisis no sea su Waterloo, pero si le sumamos: última actuación en la ONU, negociación con Irán, papelones en Georgetown y Harvard, reclamos salariales de las Fuerzas de Seguridad, cepo cambiario, reclamos sindicales no debidamente atendidos,  creciente inseguridad, inflación, canje de bonos del Chaco, ferrocarril Sarmiento, innumerables casos de corrupción impúdica, intento de golpe en la Auditoría General de la Nación, Consejo de la Magistratura y presiones del ministro de justicia, 13-S y los próximos 8-N, 7-D y 10 D, etc., etc.; seguramente el resultado será muy parecido al que sufrió el emperador Napoleón después de su fracasada campaña en Rusia… exilio en la isla de Elba, preludio de su posterior Waterloo.

Las cercanas elecciones de 2013 son un llamado a la reflexión para toda la sociedad, el oficialismo deberá medir muy bien sus próximos pasos…, la oposición elegir su Wellington y la sociedad elegir la mejor opción de cara al futuro… no sea cuestión que los argentinos terminemos por perder nuestra libertad y la república tenga su Waterloo.