viernes, 1 de febrero de 2013

DERECHO MONTONERO


El ex secretario de Hacienda del último gobierno de facto,  Juan Alemann enfrenta un juicio oral, acusado de haber presenciado supuestos crímenes de lesa humanidad en la ESMA mientras era funcionario y de haber omitido denunciarlos. Mediante una carta de lectores, al diario La Nación, le puso nombre al “derecho diseñado a medida de la venganza impiadosa de los vencidos en el campo de batalla de las armas”… con certeza y poder de síntesis, simplemente lo llamó: derecho montonero.


Y es ese derecho montonero el que ha permitido armar el “circo de la justicia para poder juzgar a los acusados de crímenes de lesa humanidad”… en consecuencia todos los juicios de los crímenes de lesa humanidad son ilegales y todo lo actuado en los mismos se encuentran viciados de nulidad absoluta.


Si deseamos lograr la Pacificación Nacional Definitiva deberemos transitar el siguiente camino:
  • Reconocimiento por parte de todos los partícipes del daño ocasionado a la república.
  • Aplicar la ley en su verdadero “estado de derecho” no el de las “aberraciones jurídicas” a medida y en forma discriminatoria. Igualdad ante la ley para todos.
  • Modificar la “historia oficial” y ajustarla a las verdaderas circunstancias de la época.
  • Castigo a quienes, dentro del marco de una guerra, hayan cometidos delitos comunes.
  • Reparación y reconocimiento a todas las víctimas de la violencia, no a las “bajas de combate”.
  • Prevención para que nunca más en la República Argentina los políticos le escapen a sus responsabilidades y evitar de esa manera que la sangre nuevamente manche nuestro suelo patrio.
  • Reconciliación, concordia y perdón entre todos los argentinos. De una vez por todas debemos pensar en el futuro y el país que queremos legar a las generaciones futuras.

Sinceramente,

Pacificación Nacional Definitiva
por una Nueva Década en Paz y para Siempre



Viernes 01 de febrero de 2013 | Publicado en edición impresa
Cartas de los lectores

DERECHO MONTONERO
Con relación a la interesante polémica desatada en la nación sobre la actual justicia argentina, me permito señalar que lo que sucede es que se está aplicando el derecho montonero, que va ingresando de contrabando al derecho argentino a través de fallos de jueces y dictámenes de fiscales. Este derecho, en su parte penal, tiene dos raíces: la inquisición, en la cual la acusación ya constituía la condena, y el derecho del nazismo alemán, en el cual el mero hecho de ser judío constituía un crimen. En el derecho montonero esto cabe a militares y civiles que fueron funcionarios relevantes del Proceso.

Espero que no pase mucho tiempo hasta que los jueces que aplican el derecho montonero sean llamados a dar explicaciones. Sospecho que la iniciativa de reforma constitucional no responde sólo a la re-reelección, sino a que se quiere introducir principios del derecho montonero en nuestra Carta Magna, como la eliminación de la irretroactividad de las leyes y del principio de cosa juzgada, así como la posibilidad de anular leyes ya declaradas constitucionales por la Corte Suprema, después de 16 años, como ya se hizo en 2003. Además el derecho montonero tiene otro concepto del derecho de propiedad.

Juan E. Alemann
DNI 4.014.307

martes, 29 de enero de 2013

LA FLOTA DE GUERRA ARGENTINA SE VA A PIQUE


ARGENTINA | Los militares culpan al Gobierno de falta de interés

Ramy Wurgaft (corresponsal) | Buenos Aires
Actualizado lunes 28/01/2013 11:29 horas

Rara vez los que navegan por alta mar divisan a un barco de la Armada Argentina. Casi la totalidad de la Flota de Guerra permanece anclada en la base de Puerto Belgrano, a salvo de las tormentas pero expuesta al clamoroso desinterés de Cristina Kirchner en su mantenimiento. El ministro de Defensa, Arturo Puricelli ha admitido que se le "cae la cara de vergüenza" por el reciente hundimiento del 'Santísima Trinidad', buque insignia en el desembarco de las tropas argentinas en Islas Malvinas, al inicio de la guerra con Gran Bretaña (1982).


A pesar de los intentos del Gobierno por ocultarlo, el 50% de las naves que componen la flota correría la misma suerte que el 'Santísima Trinidad' si no llegan los fondos para mantenerlas a flote. No hay indicios de que la Casa Rosada (sede del gobierno) vaya a hacerlo. "Detrás de la apatía de la presidente hay motivos ideológicos. Para ella el almirantazgo es un nido de golpistas en potencia. Le importa un comino que los barcos se vayan a pique", ha comentado a ELMUNDO.es Toribio Juárez, experto en materia naval.

Batalla naval. | El buque Santísima Trinidad se fue a pique y comenzó la búsqueda de responsables.

El Libro Blanco de Defensa, una especie de catálogo del material bélico disponible, señala que la Armada dispone de 16 barcos con capacidad ofensiva. En la práctica, de los 6 destructores incluidos en la lista, sólo 2 están en condiciones de navegar. El mejor de los barcos de esa clase, el 'Heroína', se inclina peligrosamente hacia un costado por el mal funcionamiento de sus turbinas.

Ejercicios en tierra

El destructor tenía aprobado un presupuesto para renovar la maquinaría, pero el dinero se destinó a la reparación de embarcaciones en peor estado. De los tres submarinos que posee la Armada, ninguno podría sumergirse y luego volver a la superficie. Las corbetas 'Gómez Roca' y 'Granville' sólo pueden navegar de día, puesto que quedaron 'ciegas' tras estropearse el radar.


Los rangos medios de la marina de guerra acusan al gobierno de Cristina Kirchner de haber dictado una sentencia de muerte contra la flota. Y en cierta medida, culpan al propio almirantazgo por guardar silencio. "El Libro Blanco es una payasada y eso lo sabe hasta el último grumete. La cúpula naval no puede admitirlo sin poner en riesgo la seguridad nacional. No podemos decir que andamos en canoa. De todas maneras, lo mínimo que se les exige a nuestros superiores es que hagan oír su voz en la Casa Rosada", ha señalado un ex oficial que ha pedido mantenerse en el anonimato.

Volviendo al Libro Blanco de Defensa, un oficial de la Infantería de Marina ha declarado al diario 'Perfil' que el texto de uso técnico se ha convertido en un panfleto de marketing político. "No entiendo por qué hay tantas fotos de la señora Kirchner y de su difunto esposo (el ex presidente Néstor Kirchner) cuando ambos sienten un profundo rechazo hacia las fuerzas armadas", ha expresado el marine.

Sobra decir que la agonía de los buques que vegetan en el puerto repercute negativamente en la preparación de las tripulaciones. En la década de los 80 los marinos debían cumplir con un mínimo de entre 40 y 60 días de navegación al año. Hoy se consideran afortunados los que salen cinco o 10. "Los ejercicios en tierra son tan útiles como jugar con barquitos de papel en un charco. En estas circunstancias, más vale que desguacen los barcos y los vendan como chatarra antes que seguir con la farsa", concluye Juárez.


NOTA: Las imágenes y negritas no corresponden a la nota original.

SIN DUDAS... FUE UNA GUERRA


Para sostener la afirmación del profesor Mauricio Ortín, nos limitamos a transcribir lo expresado al respecto, por el ex dirigente máximo de Montoneros“Coincido con Videla. Fue una guerra. Habrá habido alguno que otro desaparecido que no tenía nada que ver pero la inmensa mayoría eran militantes y, de ellos, la mayoría eran montoneros. A mí me hubiera molestado muchísimo que mi muerte la utilizaran para decir que fui un pobrecito dirigente asesinado. (Mario Firmenich). 


También y a modo ilustrativo de la forma de pensar de los llamados -por el relato oficial- jóvenes idealistas transcribimos los dichos de Mario Roberto SantuchoComandante del ERP: “Creo que para lograr la patria socialista vamos a tener que matar a no menos de un millón de personas”.


Somos de opinión que las expresiones del señor Teniente General (R) Don Jorge Rafael Videla, entonces Presidente de la Nación y Comandante en Jefe del Ejército Argentino, la de los dos máximos dirigentes terroristas argentinos Mario Fimenich y Mario Roberto Santucho, sumadas al reconocimiento de los integrantes del Tribunal que juzgó a las Juntas Militares refuerzan fehacientemente que el conflicto violento de los años 70(s) fue una guerra. Afirmación sostenida por muchos testigos de la época y que fuera desconocida por los tribunales sujetos a obediencia debida del poder de turno, razón por la cual sostenemos que todo lo actuado en los juicios llamados de lesa humanidad es nulos de nulidad absoluta.

Sinceramente,

Pacificación Nacional Definitiva
por  una Nueva Década en Paz y para Siempre



Fue una guerra
00:16

Por Mauricio Ortín, Profesor de Filosofía - UNSa

En la sección Carta de Lectores de El Tribuno del 26/01/2013, Oscar TorresNéstor González y demás firmantes me acusan de mentiroso y falaz por haber afirmado en este mismo diario (art. “Con Cuba: las cosas por su nombre”) que, durante la década del '70, en la Argentina, hubo una guerra. También, me invitan a debatir públicamente el tema. Al respecto, digo que acepto con todo gusto y que elijo esta columna y este prestigioso diario para contestar. Sostengo que “fue una guerra” por donde se la mire y que la negación que se hizo de ella es la mentira más grande jamás contada en la historia argentina.


La incorrección argumentativa de los firmantes se revela en que pretenden corroborar la supuesta veracidad de que “no fue una guerra” sirviéndose de la “falacia de la autoridad” y no recurriendo a los hechos mismos. En consecuencia, afirman que, “No fue una guerra”, porque así lo sentenciaron los jueces fulano y mengano que son los que saben. Pero, también en lo que se conoce como “El juicio a las Juntas” durante la presidencia de Raúl Alfonsín, los jueces sentenciaron de que “fue una guerra revolucionaria”. ¿Por qué se debe tomar como palabra santa los fallos de “los Oyarbide y compañía” y no la de los ex jueces TorlascoGil LavedraArslanianValega AráozLedesma y D'Alessio. Si mañana un juez repite mil veces que Evo Morales es rubio”; luego, Evo ¿es rubio? Yo diría que no porque la realidad, tozuda como ella sola, termina por imponerse. Y como lo mejor es que hablen los hechos y no las interpretaciones, pasemos a éstos.


a) A principios de la década del '70, el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), por su lado, y la Organización peronista “Montoneros” crearon, con el objeto de tomar el poder a través del asalto por las armas e instaurar la dictadura del proletariado, el Ejército Revolucionario del Pueblo y el Ejército Montonero, respectivamente. Las declaraciones de guerra al gobierno constitucional, como así también el detalle de sus acciones bélicas, eran publicadas en sus revistas y en entrevistas que concedían a distintos medios. Con el encabezado de “Parte de Guerra”, se reivindicaban secuestros extorsivos, homicidios, ataque a cuarteles, toma de localidades, combates en el monte tucumano, “juicio” y ejecución de traidores, robos, cárceles del pueblo, etc. Poseían fábrica de armas, de explosivos y recibían apoyo de organizaciones armadas de izquierda de otros países (Tupamaros, el MIR chileno y la OLP de Yasser Arafat). El gobierno cubano de Fidel Castro les proveyó de apoyo logístico y entrenamiento militar. Ambas organizaciones, en forma expresa, anunciaron a los cuatro vientos que estaban en guerra y que dentro de ese contexto habría que explicar las decenas de miles de atentados a la vida y la propiedad que cometieron.

Firmenich, Arafat y Vaca Narvaja

Hasta ahí, los hechos. Ahora bien, si estos son tan contundentes cabe preguntarse: ¿Por qué se pretende negarlos con una interpretación “tirada de los pelos”? Si “no fue una guerra”, ¿qué fue, entonces? Los soldados que matan en la guerra no son juzgados como asesinos; luego, si “no fue una guerra” todos los que participaron (incluidos, las autoridades democráticas que dieron la orden de defender el gobierno constitucional), eran asesinos. Las FFAA afirman que “fue una guerra”. Otros, allegados a ERP y Montoneros, sostienen lo contrario. Ahora bien, si no estaban en guerra, entonces, ¿por qué mataban? Siguiendo esta interpretación, es necesario concluir que lo hacían porque eran delincuentes comunes. Es decir, miserables y degenerados asesinos seriales que se organizaron para matar, robar, secuestrar y aterrorizar por pura perversión. Conocí a algunos del ERP que murieron en manos del Ejército y puedo atestiguar que eran buenas personas aunque totalmente turbadas por el fundamentalismo marxista. Estoy absolutamente persuadido que no les hubiese gustado (porque, es injusto) que se los recuerde como a abyectos criminales. Los sobrevivientes del ERP y Montoneros se consideran ¿criminales comunes o combatientes de una guerra? ¿Por qué no le preguntan a ellos por qué mataban soldados, sindicalistas, empresarios, políticos, diplomáticos y ciudadanos de a pie?

Bomba en el comedor de seguridad federal

Por último, dicen (los que firman la carta) que “no fue una guerra” y que los que afirman lo contrario (en este caso, yo) cometen “apología del delito”. Si no se piensa como nosotros, entonces, ­marche preso! ­Linda y valiente forma de debatir! (aunque... un poquitín totalitaria).

“Reclamo de vosotros y en nombre de vuestros principios, la libertad que os niego en nombre de los que me son propios”. Esta frase, atribuida a Luis Veuilliot, expresa a la perfección lo que la izquierda autoritaria ha ve  nido realizando con los derechos humanos.

FUENTE: http://www.eltribuno.info/salta/246831-Fue-una-guerra.note.aspx

NOTA: Las imágenes y negritas no corresponden a la nota original.

lunes, 28 de enero de 2013

CONVOCACIÓN A DEBATIR SOBRE LESA HUMANIDAD

Por el bien de la república y sus instituciones, esperamos que el fiscal Javier Augusto De Luca acepte la convocatoria a un debate formal y público entre hombres de derechos sobre un tema que genera muchísimas dudas en la sociedad argentina.

Carta de lectores. LA NACION. 27-01-13

fiscal Javier Augusto De Luca

En su carta del 25 del actual, el fiscal Javier Augusto De Luca afirma que "del artículo del embajador Cárdenas sobre el peso de la prueba de la autoría en los delitos de lesa humanidad en los juicios de Nuremberg se desprende una velada identificación entre la postura atribuida al fiscal soviético en aquella oportunidad y el proceder de los fiscales y jueces argentinos en los casos de lesa humanidad". Disconforme, pide que se exponga "con precisión algún caso en el cual una persona hubiera sido acusada y condenada aquí como responsable de delitos cometidos durante el terrorismo de Estado sin pruebas de su aporte objetivo y subjetivo y más allá de toda duda razonable".

La Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia lleva años recorriendo tribunales y cárceles de todo el país, recopilando documentación y entrevistando a presos políticos, jueces y defensores. Esto permite a nuestra asociación -integrada por más de 400 abogados independientes- mostrar, con abrumadora precisión, la gran cantidad de casos de acusaciones y condenas fundadas en suposiciones y/o en testigos visiblemente mendaces.

De hecho, los juicios en los casos llamados "de lesa humanidad" se vienen rigiendo por pautas totalmente distintas de las que se aplican en todos los demás procesos y que se observaron en la historia judicial argentina. Sólo se buscan y consideran los testigos de interés comprometidos con la violencia de los 70; jamás se ha admitido el aporte objetivo y subjetivo del imputado y todo el escrúpulo del trabajo judicial se agota en el esfuerzo por dictar duras condenas, para concretar de cualquier manera la política que han puesto en práctica.

En consecuencia, convocamos formalmente por este medio al fiscal De Luca a debatir pública y objetivamente el tema en un ámbito apropiado, que permita hacerlo con respeto y serenidad.

Alberto Solanet               Mariano Gradín
Presidente                          Secretario
Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia