sábado, 25 de octubre de 2014

ATENEO PROYECTO Y UNIÓN NACIONAL










Ateneo Proyecto y Unión Nacional, realizara disertaciones en dos jornadas sobre Constitución Nacional y su vigencia para un proyecto de Nación.-


La entrada será libre y gratuita y se otorgarán certificados de concurrencia.

Contacto:
15-5343-4992

Titulo de las Jornadas
Constitución Nacional, su vigencia para un proyecto de Nación.-

Cronograma:

Lunes Día 27/10

15.00hs
Dará comienzo al evento el Presidente de la SADE-  SR. Alejandro Vaccaro 

1°)Concepto y compresión de Políticas de Estado.- Gral Juan Miguel Giuliano.-

15.50hs a 16.45hs
2°)Federalismo en lo Político, Social, Financiero y Económico.-
Sra Carolina Barros, Sra. Cristina M. de Orsi, Dra. Cristina Guzmán.

Intervalo de 15" (refrigerio)

17.00 hs a 17.55hs.
3°) Los Poderes Gubernamentales.- Dr. Alberto Garcia Lema
Los Controles Institucionales.- Dr. Horacio Pernasetti.- Dr. Hector Polino

18.00hs a 19.00hs.
4°) La Familia como base de la Organización Social, concepto de Patria e Identidad e Integración Social.- Política Cultural.- Art 75 inc 19 C.N.
Sr. Miguel Alcides Torrado. Contraalmirante Miguel Angel Troitiño. 

19.00 hs. a 19.45hs
La Emergencia y la Anomia. Dr. Alejandro Fargosi cerrando el primer día.-

Martes Día 28/10

15.00hs a 15.30hs.
5°) El  Trabajo y su Precariedad.- Sr. Oraldo Britos 

15.40  hs a 17.00hs.
6°)Los Derechos Humanos en su aplicación Política y Jurisprudencial.-
Dr Ramón H. Gauna. Dr. Emilio Hardoy y Dr. Jorge Vanossi.

Intervalo de 15" (refrigerio)

17.20 hs a 18.45hs 
7°)Corrupción. Crimen organizado Art. 36 C.N..-Trata de personas y de órganos.- 
Droga y Narcotráfico.-
Legislador Gustavo Vera, Lic. Claudio Mathe. Dr. Cesar Arias.

Intervalo de 15"

Conclusiones y cierre a cargo del Dr. Cesar Arias

TIEMPO DE SUFRIR PERO NO DE RENDIRSE

El Libro del Eclesiatés, perteneciente al Antiguo Testamento, dice textualmente: "Todo tiene su momento, y todo cuanto se hace debajo del sol tiene su tiempo. Hay tiempo de nacer y tiempo de morir; tiempo de plantar y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de matar y tiempo de curar; tiempo de destruir y tiempo de edificar; tiempo de llorar y tiempo de reír;…" En nuestra querida Argentina, por obra y gracia de los malos gobernantes, hemos entrado claramente en el tiempo de sufrir.

En la década de los “setenta”, militares, policías y empresarios eran los blancos favoritos de las bandas terroristas de  ERP  y Montoneros que secuestraban, atentaban  y asesinaban, en los lugares y momentos más favorables para su cobarde y criminal accionar. Por las noches, en  las calles en que había comisarías se bloqueaban las esquinas para prevenir que fueran atacadas con el doble objetivo de generar bajas de uniformados y robar armas. Los integrantes de los sectores elegidos como blancos vivían con temor  y preocupación cada vez que salían o llegaban a sus casas. Si concurrían regularmente a su trabajo se recomendaba cambiar los horarios de salida y las rutas de desplazamiento. Al llegar y salir del domicilio se tomaban precauciones especiales y se extremaban las medidas de seguridad personal.
  
Han transcurrido cuarenta años y algunas cosas han cambiado. El temor a los asaltos, secuestros  y asesinatos al salir  y  llegar al domicilio,    que ahora se llaman “entraderas”   y “salideras”, ya no constituyen situaciones exclusivas sufridas por  un grupo determinado. El delito se ha “democratizado” y ahora toma víctimas de cualquier sector social.  Los ricos, la clase media y aun los más pobres caen bajo las balas  o el puñal de los delincuentes a veces por  objetos tan nimios como un celular o una campera. Las comisarías ya son asaltadas a la luz del día porque los criminales han perdido la sensación de peligro y la han reemplazado por la de impunidad. Los delincuentes se pavonean frente a las cámaras de televisión, son entrevistados, promueven su lenguaje chabacano y son presentados ora como víctimas de la sociedad, ora como  representantes de una cultura con valores dignos de consideración social.
Constituidos en “batallones militantes”, arropados por teorías jurídicas abolicionistas y transformados en símbolo progresista de lo “políticamente correcto”,  los delincuentes han logrado imponer su cultura “tumbera” bajo el perverso paraguas de poder de un gobierno “kirchnerista” que nos dejará esta maldición entre sus peores legados.
  
También el crecimiento exponencial de la producción, tráfico y consumo de drogas es una marca registrada de esta década de gobierno K. Hubo una etapa de negación de lo evidente, encabezada por el entonces Ministro de Seguridad Aníbal Fernández. Luego llegó la clásica acusación a los opositores sintetizada en el señalamiento a  los “narcosocialistas” formulada en el mismísimo Congreso y ahora se llegó a la etapa de la resignación y el intento de someternos a la legalización del consumo de cualquier sustancia como propuso el Director de la SEDRONAR.  Nada de cerrar las fronteras al narcotráfico, de enfrentar y perseguir a productores, importadores y capitalistas de la droga, y menos aún, realizar masivas campañas de prevención.  Es mucho más descansado y probablemente más remunerativo rendirse y entregar la salud de nuestros jóvenes a la esclavitud de la adicción y la codicia de los poderes que manejan el mercado de las drogas. Pareciera que, más allá de la incompetencia o la complicidad, quienes nos gobiernan odiaran a la sociedad de la que surgieron  y quisieran corromperla hasta sus cimientos.
  
A pesar de estos probados antecedentes nefastos en todo lo que respecta a seguridad, la señora presidente pretende en sus últimos meses de ejercicio modificar toda la legislación judicial, con un proyecto de Código Penal que ha sido severamente cuestionado por las facilidades que otorga a los delincuentes y ahora con un proyecto de Código Procesal que tras la fachada aparente de reflejar un endurecimiento, totalmente ajeno al sentir “progresista” que siempre animó al oficialismo, parece esconder el intento de dejar  en manos de fiscales afines el irrefrenables pedido de cuentas que sufrirá este gobierno tan pronto deba soltar los resortes del poder. 
  
Este extemporáneo y trasnochado espíritu reformista  no solo abarca el ámbito de la justicia sino que ha avanzado en leyes que aumentan el poder central  en el manejo de los recursos energéticos, en el control del abastecimiento o en cualquier otra área en que el capricho presidencial pretenda incursionar. Hemos llegado al extremo de estatizar ese engendro pseudo académico que dio en llamarse “Universidad de las Madres”, escuela de adoctrinamiento revolucionario, cuyos desaguisados administrativos serán pagados una vez más  con los fondos de los sufridos contribuyentes. 

Lejos quedaron las fantasías de quienes pensaron que el Frente para la Victoria, con la señora presidente a la cabeza,  organizaría un traspaso de gobierno consensuado, dejando desatados los caminos para el crecimiento y el desarrollo económico e institucional de nuestra vapuleada república. Esa esperanza desconocía la naturaleza de un estilo y una personalidad profundamente mezquina y egoísta en la que solo caben el resentimiento y la confrontación. De alguna manera, parece que el gobierno no perdona a la ciudadanía que, con su voto, haya cerrado las puertas a la  reforma constitucional y al continuismo y nos castiga complicando nuestro presente y amenazando nuestro futuro.

Cuenta para ello con el voto atado de sus legisladores, incapaces de anteponer el interés de sus representados por sobre los intereses partidarios y la verticalidad absoluta, a quienes les cabe la responsabilidad histórica de haber convalidado desde  un presupuesto viciado de falsedad hasta el otorgamiento de poderes que exceden el mandato constitucional. Esta etapa legislativa será recordada como el tiempo en que los principios  y valores republicanos fueron aplastados por imposición del número de una mayoría circunstancial incapaz de aceptar el debate, las evidencias y los puntos de vista divergentes.

Sin embargo, esta soberbia política choca con límites que  no puede superar, tal como son las leyes de la economía. Por mucho que se tergiversen las cifras y se metamorfoseen los índices de precios, la sistemática reincidencia en gastar mucho más que lo recaudado y mantener un déficit fiscal elevado han minado las bases del crecimiento y la credibilidad económica. La Argentina está en recesión. No se trata de un colapso como el que nos hundió en el 2001 pero si de una presión fuerte y persistente que nos está llevando a la asfixia. La combinación de alta inflación, falta de dólares para importación  y un dólar oficial por debajo de su valor real, van quitando competitividad a la economía y provocando cierre de empresas  y suspensiones que el gobierno puede negar pero no evitar. Como se ha dicho claramente en el coloquio de IDEA, este modelo (si alguna vez existió como tal) está agotado.

Tampoco ha logrado el gobierno “kirchnerista” asustar a sus interlocutores fuera de las fronteras nacionales. Sus ataques desmesurados contra el juez que le dio la razón a los tenedores de bonos impagos en su litigio con la Argentina y la insistencia en descalificarlos como “fondos buitres”, sin atender razones ni medir expresiones,  nos ha puesto en situación de “default técnico”. Ahora, los poderosos estudios jurídicos que apuntalan la estrategia de los litigantes, han comenzado a apuntar contra  los bienes presidenciales y de empresarios amigos del poder en su afán por encontrar fondos embargables,  y con ello, podrían llegar a prestar un servicio inestimable en el develado de las tramas de corrupción que los jueces argentinos soslayan o dilatan. Lamentablemente todo el descrédito que acumulan nuestros funcionarios también mancha  y enturbia el buen nombre  y la seriedad de la nación misma.
  
Con estos escenarios externos e internos el año largo que falta hasta que la señora Cristina Fernández entregue el  poder será  un calvario para la Argentina. Es imprescindible manifestar democráticamente el profundo rechazo que genera esta política oficialista de dejar tierra arrasada, empresas quebradas, deudas impagables, exportadores sin mercados y una sociedad desalentada, con la oscura esperanza de que el fracaso de su sucesor  reabra las puertas del poder a quienes tanto daño le están haciendo al país. En cada tribuna y en cada acto de campaña, en los medios y en las calles, tenemos que hacer saber que los argentinos no estamos dispuestos a que nos roben el futuro y que señalaremos con el dedo acusador a todos los que se presten a esa traición social y moral. Que el espíritu no decaiga pues eso es lo que desean los perversos. Tengan por seguro que en nuestra  Argentina   ningún hombre  ni mujer de bien se rendirá y afortunadamente, todavía existen muchos.

Juan Carlos Neves
Primer Secretario General de Nueva Unión Ciudadana

jueves, 23 de octubre de 2014

LLAMAR A LAS COSAS POR SU VERDADERO NOMBRE


El poder de turno tiene la “manía” de cambiar todo o muchas de las cosas que se han construido en la historia del país, es así que a Julio Argentino Roca lo bajan de su lugar en Río Gallegos para subir al extinto presidente Néstor Kirchner, remueven la estatua de Colón para –en el futuro– colocar una estatua a Juana Azurduy. Se cambian nombres a calles, un puente, un paso bajo nivel, un club, un albergue estudiantil, una plaza, una terminal de ómnibus, un estadio olímpico municipal, una rotonda, una delegación de Anses, un centro genético, un aeropuerto, una granja para chicos, un parque industrial, una facultad de periodismo, una casa, un distribuidor de tránsito, etc... a todo lo rebautizan “Néstor Kirchner”.


La Galería de los Patriotas Latinoamericanos del Bicentenario, es un salón ubicado dentro de la Casa Rosada, dedicada a homenajear a patriotas de América Latina destacados en distintas disciplinas… el Ché Guevara tiene un lugar de inmerecido homenaje junto a los Padres de la Patria y otros próceres que dieron todo por nuestra Patria, este personero solo importó la violencia en un frustrado intento de su autoría de iniciar la guerra foquista en el norte argentino.

Y así son todas las cortinas de humo que nos tienden para hacernos creer que la Patria la hicieron ellos, nada más idiota que cambiar las verdades históricas.

Sinceramente,

Pacificación Nacional Argentina
Por una Nueva Década en Paz y para Siempre


DIRCURSO PRONUNCIADO EN EL COLEGIO “SEDES SAPIENTIAE” CON MOTIVO DEL SUPRIMIDO “DÍA DE LA RAZA”

El presidente Hipólito Yrigoyen estableció el “Día de la Raza”, mediante un decreto del cual cabe citar algunos párrafos. Entre otras cosas se dice allí:

“El descubrimiento de América es el acontecimiento más trascendental que haya realizado la humanidad a través de los tiempos (…) Se debió al genio hispano intensificado con la visión suprema de Colón. (…) La España descubridora y conquistadora volcó sobre el continente enigmático el magnífico valor de sus guerreros, el ardor de sus exploradores, la fe de sus sacerdotes, el preceptismo de sus sabios, la labor de sus menestrales, y derramó sus virtudes sobre la inmensa heredad que integra la nación americana”.


Eso es lo que escribió don Hipólito, máximo referente del partido radical. Pero también tocó el tema Juan Domingo Perón, fundador y líder del justicialismo, cuando, en una conferencia  pronunciada el 12 de octubre de 1947 en la Academia Argentina de Letras, señaló que:

“Para nosotros la raza no es un concepto biológico. Es algo puramente espiritual. Para nosotros, los latinos, la raza es un estilo. Un estilo de vida que nos enseña a saber vivir practicando el bien y a saber morir con dignidad. Nuestro homenaje a la madre España constituye también una adhesión a la cultura occidental. Su obra civilizadora cumplida en tierras de América no tiene parangón en la Historia. Es única en el mundo. (…) Su empresa tuvo el sino de una auténtica misión. Ella no vino a las Indias ávida de ganancias y dispuesta a volver la espalda y marcharse una vez exprimido y saboreado el fruto. Llegaba para que fuera cumplida y hermosa realidad el mandato póstumo de la Reina Isabel de “atraer a los pueblos de Indias y convertirlos al servicio de Dios”.


Los párrafos citados son suficientemente elocuentes para demostrar qué pensaban las máximas figuras de los dos partidos que canalizan la amplia  mayoría del electorado nacional.

Sin embargo, nuestro actual gobierno, además de abatir la estatua de Cristóbal Colón, emplazada cerca de la Casa Rosada, ha suprimido el Día de la Raza, reemplazándolo por el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, o sea del respeto a las elementales manifestaciones culturales de los hoy llamados pueblos originarios.


Y digo elementales manifestaciones culturales pues mal se puede considerar cultura a las costumbres practicadas por los pueblos indígenas cuando llegaron los españoles a América. En tal sentido conviene recordar que la mayoría de ellos apenas habían superado el período neolítico, carecían de escritura, desconocían la rueda y el uso de la moneda. Amén de ofrecer a sus feroces deidades sacrificios humanos, cuyas víctimas eran obtenidas mediante sangrientas cacerías de adolescentes destinados a la inmolación.  Cosa que ocurría mientras en España se vivía ese apogeo artístico que fue el Siglo de Oro.


¿Significa esto que haya que detestar a los indios? Todo lo contrario. Lo que significa es que, tal como lo hizo en su momento España y luego la Nación Argentina, de lo que se trata es de elevarlos culturalmente, de evitar discriminarlos, asimilándolos por completo al resto de la población y facilitándoles así  que sean tan argentinos como los mejores argentinos.

¿Por qué, entonces, suprimir el Día de la Raza y reemplazarlo por el del respeto a una cultura estancada en el neolítico? El mismo Perón, en la conferencia ya citada, nos daba una pista sobre el particular al decir:

“Algunas corrientes ideológicas de signo progresista pretenden imponer una visión deformada de la Conquista de América, preconizando un indigenismo anacrónico, tergiversador y deformante de la Historia. Los peronistas no podemos caer en el juego de aquellos que en nombre de “los pueblos originarios” aborrecen nuestra identidad hispanoamericana”.


Y puedo traer también a colación al aguerrido fraile Francisco de Paula Castañeda quien, de manera rotunda y sintética, afirmó: “Por Castilla somos gente”.

Para despejar un eventual equívoco, antes de concluir quiero aclarar algo que, quizá, no requiera aclaración. Me refiero a la posibilidad de que a alguien se le ocurra asimilar la hispanidad a la nacionalidad española. Concepto  desde luego equivocado pues la hispanidad constituye un conjunto de ideales, un puñado de valores, que aparecen desligados de nacionalidades y ascendencias.  Sirvan algunas menciones para ilustrar lo que digo:


Cristóbal Colón, descubridor del Nuevo Mundo para la corona castellana, era genovés. Carlos I de España y V de Alemania, el gran emperador, teutón. Griego, Doménico Teotocópuli, aquel genio que pintó el alma hispana.  Ambrosio de Spínola y Grimaldi, representado por Velázquez en su célebre cuadro “Las Lanzas”, Capitán General del Ejército de Flandes, genovés como Colón. Francisco de Paula Bucarelli, gobernador del Río de la Plata que dispuso la expulsión de los ingleses de las Malvinas, en 1770, descendía de italianos. Washington Irving, escritor enamorado de la alhambra granadina, era norteamericano. Y la más conocida de las Carmen, seguramente hablaría con acento francés, como Bizet,  autor de la ópera que le está dedicada.


¿Y qué es la Hispanidad? Diría que es profesar la fe en Jesucristo y el amor a María Santísima, poseer el sentido del honor, respetar a la familia bien constituida, amén de practicar el coraje,  la hospitalidad y la galantería. Sin olvidar que es a través de España que estamos insertos en la Civilización Cristiana, como legítimos herederos de Grecia y de Roma.

Celebremos entonces el Día de la Raza, con regocijo y sin recato, dejando de lado el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, su mezquino sucedáneo.

Esto es todo. Nada más.

Juan Luis Gallardo
Octubre del 2014

NOTA: Las imágenes no corresponden a la nota original.

"CRONOLOGÍA DEL TERROR EN LA ARGENTINA" LOS ATAQUES DE LA GUERRILLA 1873-2007

La Asociación de Familiares y Amigos de las Víctimas del terrorismo en Argentina (AFAVITA) invita  a la presentación de un libro, escrito por Sebastián Miranda[1]. Nuestra asociación adhiere y hace extensiva la invitación a todos sus lectores.


Sebastián Miranda


[1] Sebastián Miranda es profesor y licenciado en Historia. Nacido en 1975 en la Capital Federal, está casado y es padre de dos hijos. En el año 2002 fue distinguido por la Asociación de Graduados de la Universidad del Salvador por tener el mejor promedio de todas las facultades de la universidad ese año. También es catequista. Es docente desde hace 17 años y se ha desempeñado como tal en los niveles secundario, terciario y universitario dictando las cátedras de Historia Argentina I y II, Historia de las Relaciones Exteriores Argentinas, Derecho, Política y Doctrina Social Cristiana. Es coautor de los libros Ciencias Sociales 7 y 8, editados por la Universidad Católica de La Plata que en el 2006 fueron distinguidos por la Exposición del Libro Católico con la Faja de honor padre Leonardo Castellani. Desde hace ocho años se desempeña como asesor de Historia e integrante de la unidad de análisis de la revista Defensa y Seguridad Mercosur, publicación especializada en temas militares, siendo autor de más de 30 notas sobre historia militar y geopolítica. Entre ellas se destacan Malvinas. Historia de una usurpación; Políticas de defensa en la historia argentina; La batalla de Monte Chingolo; La batalla de La Tablada; Vuelta de Obligado. La batalla del honor nacional argentino; La batalla de Juncal; Roberto Estévez, arquetipo de oficial; Martín Miguel de Güemes y la gesta sanmartiniana; Los nuevos malones y Mbororé. La primer gran batalla por la soberanía. Colaboró activamente en la elaboración del documento Una propuesta positiva para la defensa nacional. Ha dictado numerosas conferencias y cursos de perfeccionamiento.

miércoles, 22 de octubre de 2014

SE NECESITA UN NUEVO PACTO DEMOCRÁTICO

Luis Alberto Romero

Como los personajes de una novela sentimental, los políticos de la oposición y sus potenciales votantes están hoy desencontrados, transitan por órbitas diferentes y llenan de incertidumbre al lector que espera un final feliz. La dura pedagogía kirchnerista ha enseñado a mucha gente a preocuparse por el destino de su voto, a mirar más allá de beneficios inmediatos y a preocuparse por el rumbo del país. Esa preocupación recorre hoy los ámbitos de la sociedad civil. Muchas asociaciones convergen en una confederación que quiere unificar sus ideas y hacerse escuchar por los políticos; círculos y clubes de intereses variados se vuelcan a discutir proyectos para el país; ensayistas de todo tipo lanzan propuestas desde las columnas periodísticas; hasta los empresarios tratan de mirar más allá de sus miedos o sus intereses inmediatos. En cualquier diálogo cotidiano aparecen la pregunta angustiada y el diagnóstico, a veces muy simple, y en varias ocasiones los ciudadanos salieron espontáneamente a la calle para decir basta y para reclamar “por una oposición unida, que piense en la Argentina que viene y no en las próximas elecciones”, según se lee en una invitación que hoy circula.

Del lado de los políticos las cosas no son tan claras. Sin duda quieren darle forma a esta aspiración, pero la política tiene sus reglas, y aun para negociar cada sector necesita hoy fortalecer a su candidato, subrayar su singularidad, distinguirse de los otros. No hay partidos bien estructurados, que puedan concertar acuerdos sólidos, y tampoco hay una personalidad destacada, un líder democrático que haga punta. La ley electoral obliga a importantes definiciones en mayo próximo, y luego de las Paso de agosto no se podrán modificar las fórmulas.

Finalmente, el ballottage establece que habrá dos ganadores: el primero y el segundo mejor. Para un candidato opositor, es una tentación fuerte competir por las suyas y alcanzar ese atractivo segundo lugar desde donde arrastrar al resto. No hay dudas de que entonces podrá acordar con las otras fuerzas, dado el clima de convergencia en la opinión. Pero será un compromiso mucho menos consistente que un acuerdo electoral previo, en el que todos los firmantes subordinen su destino personal al del conjunto y lo sellen con candidaturas comunes; eso es un verdadero y sincero pacto democrático.

¿Qué impide a las fuerzas opositoras alcanzar este acuerdo previo, que defina el alcance del cambio y consolide la fuerza política para encararlo? Además de las aspiraciones naturales de cada político, hay reservas y reticencias recíprocas. Es común decir que los proyectos son distintos, que “la centroizquierda” no puede marchar junto con “la derecha”, que no se puede “juntar el agua con el aceite”.

La competencia política es comprensible, aunque parezca un poco suicida. Pero la cuestión de los proyectos diferentes es muy discutible. Es cierto que en muchas democracias contemporáneas hay cuestiones divisivas claras, como por ejemplo el peso relativo del Estado y el mercado. Pero en la Argentina no existen hoy ni Estado ni mercado, y en su lugar tenemos gobiernos que destrozan el Estado y empresarios que buscan rentas prebendarias. Son tal para cual. Para romper esa relación colusiva y corrupta se requiere reconstruir un Estado fundado en la ley, que fije las normas generales de un mercado competitivo.

En muchos terrenos hay un largo camino que recorrer antes de poder encarar las opciones que hoy se discuten en el mundo. Este camino inicial insumirá probablemente dos o tres períodos presidenciales, y sólo podrá recorrerse con éxito si se suman fuerzas diferentes. Si tienen éxito, al final de este camino podrán discutir sus diferencias.

El nuevo gobierno arrancará con una tarea difícil: salir del desquicio de la macroeconomía, despejar la administración pública de la banda que la ha invadido y deshacer buena parte de las leyes recientemente aprobadas. Habrá medidas poco populares, sólo posibles para una fuerza política fuerte y cohesionada, dispuesta a compartir los costos.

El resto, lo que hay que hacer para la “Argentina que viene”, es a la vez claro y difícil. En primer lugar, está la cuestión institucional. Hay que desandar el camino del superpresidencialismo, restablecer la división de poderes, discutir un nuevo pacto fiscal. Todo eso con un Poder Ejecutivo que, para ser creíble, deberá renunciar, al menos gradualmente, a las prerrogativas acumuladas desde 1989. Simultáneamente hay que reconstruir el Estado, que es la herramienta de los gobiernos democráticos y la víctima de los gobiernos autoritarios. El Estado argentino lleva décadas de decadencia, corroído por el decisionismo presidencial y por las prácticas prebendarias y depredadoras. Nada de esto fue inventado por el kirchnerismo, aunque sin duda fueron ellos quienes lo llevaron a su etapa superior.

Hoy está en cuestión el Estado de Derecho, que es la base legal de la convivencia nacional e internacional. Están deteriorados los organismos de ejecución: los ministerios y las dependencias y agencias, como el paradigmático Indec. El equipo de funcionarios capaces y meritorios que supimos tener está diezmado o disperso, la ética del funcionario es un recuerdo lejano y además hay que cargar con una tropa de nuevos empleados. Hay un largo trabajo de reconstrucción, jalonado por algunas decisiones drásticas, que sólo es posible si lo respaldada una fuerza política asentada en un acuerdo previo.

Sólo un Estado en forma puede encarar cada uno de los problemas que hoy son las grandes preocupaciones: la seguridad, la educación, la corrupción. Uno de los problemas mayores es la consolidación del mundo de la pobreza, con sus organizaciones y liderazgos, sus normas, sus valores y sus formas de vida propios. Allí la ley tiene presencia sólo relativa, y sus agentes, como la policía, son los primeros sospechosos de su violación. Pero además es un mundo en el que mucha gente obtiene grandes beneficios, desde los empresarios de La Salada hasta los políticos que organizan la producción del sufragio, o más recientemente los traficantes de drogas.

La pobreza plantea opciones filosóficas, del “pobrismo” al “eficientismo”, que también podrían dividir las aguas. Pero entre los políticos no hay grandes diferencias sobre algunos cambios básicos e inmediatos, como materializar la presencia del Estado en cada barrio con una escuela, una comisaría, una fiscalía, una salita sanitaria, atendidas por personal honesto e idóneo. Para avanzar en la reintegración social el Estado necesita potenciar los valiosos emprendimientos voluntarios, meritorios pero dispersos.

Pero además hay que deshacer las tramas corruptas que viven de la pobreza, cuyas ramificaciones llegan muy alto. Poner en caja el mundo de La Salada, acabar con el trabajo esclavo, la venta de mercadería robada y la evasión fiscal requiere, además de suma pericia técnica, una fuerza política que sólo puede surgir de un acuerdo categórico entre los partidos.

No hay dudas de que estas propuestas básicas son compartidas por un sector muy grande de la ciudadanía, que hoy podría formar una nueva mayoría si encontrara una adecuada expresión política. Seguramente los políticos también concordarán con este programa de acción general, con más o menos convicción quizá. Pero construir la fuerza política que pueda impulsar este cambio de rumbo es mucho más que eso: requiere un acuerdo político sincero, un compromiso no condicionado por las encuestas o los resultados electorales. No es lo mismo acordar antes de las elecciones que después. No lo es ni para el futuro gobierno ni para quienes tenemos que sobrellevar más de un año  gobernados por quienes parecen querer llevarnos a la dictadura o a la destrucción.

Los políticos deben reflexionar a fondo sobre aquello del “agua y el aceite” y diferenciar las tareas de la próxima década de los debates futuros, que ojalá podamos llegar a tener. Pero además tienen que encontrar una forma de compatibilizar la natural competencia de liderazgos y organizaciones, sin la cual no hay política, con la urgente necesidad de construir un programa común que sea algo más que un acuerdo poselectoral. Los plazos empiezan a apretarse.

Publicado en La Nación, 14/10/2014.

CONTINUAN FALLECIENDO PRESOS POLÍTICOS


Estimados Amigos:

A través de la Unión de Promociones hemos tomado conocimiento del fallecimiento, en las oportunidades que para cada caso se expresan, de los siguientes Camaradas Presos Políticos:
  • Martes 21 de Octubre de 2014, del señor General de División (R) Ricardo Gustavo Pianta (Promoción 80 - Artillería - CMN).

  • Miércoles 22 de Octubre de 2014, del señor Coronel (R) Hugo Carlos Fantoni (Promoción 79 - Infantería - CMN).

Con ellos, son 259 (doscientos cincuenta y nueve) los Camaradas fallecidos, pertenecientes a todas las Fuerzas Armadas, de Seguridad, Policiales, Penitenciarias y civiles; en el marco de este proceso de persecución, teñido de incontables irregularidades jurídicas y sistemática venganza, propias de una justicia prevaricadora.

Expresamos nuestras sentidas condolencias a todos sus familiares, allegados, compañeros y amigos, rogándole al Señor, les conceda pronta y cristiana resignación. Esperamos que la sociedad argentina y sus representantes políticos recuerden el manto de sangre y acciones del terrorismo que los llevaron a pedir y ordenar a las FFAA que aniquilaran al enemigo subversivo que pretendía alzarse con el poder mediante el miedo, terror y violencia. En todos sus reclamos contra el avasallamiento autoritario del poder de turno deberían incorporar un justo reclamo por la paz, concordia, justicia e historia completa dentro del marco de igualdad contra la ley.

Dadas las avanzadas edades y estados de salud de los Presos Políticos en la Argentina, estas lamentables noticias son cada vez más seguidas. Una vez más levantamos nuestra voz hacia el poder de turno, no pueden continuar con esta matanza selectiva… es su obligación como presidente de todos los argentinos garantizar el debido proceso, la igualdad ante la ley, brindar asistencia sanitaria adecuada y por sobre todo lograr la unión de la sociedad para superar las antinomias que después de casi 204 años aún nos mantienen divididos. Es hora de sin odios, ni venganzas, es hora de una mirada superadora.

Por tal circunstancia, adherimos a la reiterada convocatoria de la Unión de Promociones a todos los integrantes de las distintas Fuerzas, a las distintas ONG e Instituciones vinculadas o afines, a familiares, amigos y allegados en general, a sumarse y trabajar en apoyo de todos quienes deben enfrentar esta injusta situación, a fin de afirmar y fortalecer el planteo de los justos reclamos por acceder a una justicia verdaderamente independiente, imparcial y objetiva, a través del irrestricto respeto por la Constitución Nacional.

Sinceramente,

Pacificación Nacional Definitiva
por una Nueva Década en Paz y para Siempre

lunes, 20 de octubre de 2014

FORO DE BUENOS AIRES, POR LA JUSTICIA, LA CONCORDIA Y LA LIBERTAD


El pasado 19 y 20 de agosto se llevo a cabo en la Ciudad de Buenos Aires, el FORO DE BUENOS AIRES, por la Justicia, la Concordia y la Libertad, organizado por la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia. Participaron personalidades Iberoamericanas en este importante encuentro.
Adjuntamos los videos de las distintas disertaciones y la conclusión del foro. ROGAMOS SU MAS AMPLIA DIFUSIÓN, muchas gracias.

Publicado el 14/10/2014

Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 1º parte - 19/08/14



Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 2º parte - 20/08/14


Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 3º parte - 20/08/14


Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 4º parte - 20/08/14




Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 5º parte - 20/08/14




Foro de Buenos Aires por la Justicia, la Concordia y la Libertad - 6º parte - 20/08/14 - Cierre.




FAVOR COLABORAR EN UNA AMPLIA DIFUSIÓN

domingo, 19 de octubre de 2014

DERECHOS HUMANOS

Tras el rumor sobre una denuncia que me sindicaba como "hija de desaparecidos", ocho efectivos de la Prefectura, dos técnicas del Banco Genético y dos "testigos" irrumpieron en casa de mi madre, donde yo estaba de visita. Invocaron una orden del juez Lijo y durante cinco horas me acosaron. Querían sacarme sangre por la fuerza. Ante mi negativa, recolectaron las prendas íntimas, peines y cepillos que encontraron. Me encerraron y me intimaron a quitarme la ropa interior; creo que sólo la llegada de la Policía Federal (a la que llamó mi hermana) les hizo deponer su actitud. Si yo era supuestamente la víctima, ¿por qué no conocía la causa?; ¿por qué le negaban a mi abogada una copia de la orden judicial?; ¿por qué insistían en doblegarme si lo único que pedía era hablar con el juez para hacerme el ADN con un perito de parte?

El 24 de septiembre fui citada al juzgado. Otra vez fui encerrada y acorralada. Ahora era el juez Lijo quien gritaba: "Irene no sale de acá si no deja una muestra". Cuando se me vinieron encima ni pensé, me saqué todo. Salir desnuda del despacho fue, aunque parezca exagerado, la única manera de recuperar mi libertad. Esto ocurrió a pesar de mi disposición para realizar un análisis de ADN, con la sola condición de que intervenga un perito de parte que garantice la no manipulación política de mis datos genéticos. Lo dispuso un juez, a pesar de haberle presentado un análisis de ADN, realizado en Madrid, con cadena de custodia que establece que en un 99,99% soy hija de Ernesto y Ana Barreiro.

Si los supuestos defensores de los derechos humanos me han tratado así, ¿cómo hago para no vivir sumida en el temor, ante los niveles de daño de los que son capaces cuando se trata, como en mi caso, de la hija de un militar que combatió en los 70?

Irene Paulina Barreiro
DNI 26.816.224

EL DÍA DE LAS MADRES DE LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO EN ARGENTINA Y/O ESPOSAS DE PRESOS POLÍTICOS

El Día de la Madre es una festividad que se celebra en honor a las madres en diferentes fechas del año según el país. En Argentina se celebra todos los años el tercer domingo de Octubre. La costumbre consiste en compartir una comida en familia y ofrecer regalos a las mamás.

Hoy un importante grupo de madres que tienen a sus hijos y/o esposos ausentes del hogar ya sea por haber sido Víctimas del Terrorismo en la Argentina o bien por encontrarse detenidos como Presos Políticos en las mazmorras del poder de turno que gobierna la Nación, no podrán celebrar el día o lo harán de forma diferente a la mayoría de las madres argentinas. 

Las primeras recordarán en silencio al hijo o al esposo ausente y tratarán de continuar la vida, algunas esposas del segundo grupo ya deben estar pasando por las inspecciones y controles para acceder a la Unidad Penal en el cual su ser amado se encuentra injustamente detenido por haber defendido a la Patria.

A todas ellas les ofrecemos nuestro respeto, admiración, cariño y solidaridad por el dolor que las embarga. Con ustedes la Patria está en deuda.

También para quienes han perdido a ese hermoso "ángel" ser al que Dios solo le dio el nombre de ´"Mamá", recuerden con mucho amor que ella siempre será el Ángel de la Guarda de cada uno de nosotros.

Sinceramente,

Pacificación Nacional Definitiva

por una Nueva Década en Paz y para Siempre