CARTA
ABIERTA PARA MIS LEALES VALIENTES OFICIALES, SUBOFICIALES Y SOLDADOS DE LAS
CLASES 53 Y 54 INTEGRANTES DEL "EQUIPO
DE COMBATE GAM 5" DURANTE LA "OPERACION
INDEPENDENCIA"
Como lo hago todos
los años, esté donde esté, quiero conmemorar junto a todos ustedes lo vivido
por nosotros el 14 de Febrero de 1975 y homenajear a aquellos que fueron
víctimas del terrorismo en los sucesos de ese día.
Cabe señalar que éste
es el quinto año que lo hago como Prisionero de Guerra y Preso Político,
detenido en forma anticonstitucional con “Prisión
Preventiva” desde el 01 de octubre de 2014.
Recuerden como en un
día como hoy, el 07 de febrero de 1975 a las 23 horas, partimos desde nuestro
cuartel del GAM 5, en Jujuy, en la margen Este del río Burrumayo, rumbo a
Tucumán en cumplimiento a lo ordenado por el Decreto Nº 261/75 78 del gobierno
constitucional de María Estela Martínez de Perón, donde ordenaba al Ejército
realizar operaciones militares, para “neutralizar
y/o aniquilar” el accionar de los elementos subversivos en la provincia de
Tucumán. El día 08 permanecimos en la ciudad de Tucumán, en la Compañía de
Arsenales 5, y el 09, a las 03.00 de la mañana nos dirigimos hacia lo que sería
nuestra primera “Base de Combate” en
la escuela de “Los Sosa”, junto con
el Equipo de Combate del RIM 20, integrando la Fuerza de Tareas “Chañi”.
En pocos días más se
cumplen 44 años en que nos internábamos en la selva de "La Florida", en columna de a uno, buscando una
madriguera de la llamada "Compañía
de Monte Ramón Rosa Giménez" integrante de la banda terrorista del "Ejército Revolucionario del
Pueblo" (ERP), para aniquilar su conformación en pos de "asegurar" la paz interior.
Ese 14 de febrero, a
las 07.00 horas, dos fracciones del Equipo de Combate (EC) del GAM 5 (menos una
Sección), bajo la supervisión del entonces Mayor Julio Luis Teodomiro Bidone,
2do Jefe de la Fuerza de Tarea "Chañi"
(era el 2do Jefe del GAM 5), iniciamos un reconocimiento ofensivo en el monte
hacia el sur-oeste de la ciudad de Monteros, tras atravesar el extenso y tupido
cañaveral, hasta el sur del río Pueblo Viejo. Inicialmente, la marcha se
realizó en vehículos hasta la zona denominada "El Vivero" y desde allí a pie atravesando el monte de "La Florida" hasta las
compuertas del mencionado río, lugar que se alcanzó a las 16.00 horas.
Aproximadamente una hora después, el Equipo de Combate inició el regreso por
una senda diferente, que discurría por el denso y enmarañado monte tucumano,
bordeando el río Pueblo Viejo. A las 16.45 horas tomamos contacto con un grupo guerrillero,
iniciándose un combate de encuentro contra 20/30 guerrilleros a la altura de un
puesto de la "Finca Sarmiento".
Nos encontramos casi
sorpresivamente. Los guerrilleros emboscaron a la punta de infantería del
Equipo de Combate, hiriendo gravemente al
entonces Teniente Rodolfo Richter y, cuando el otro oficial de
especialidad comando, el Teniente 1ro. Héctor
Cáceres, intentó acudir en su ayuda, recibió por la espalda un disparo
de FAL que impactó en su corazón. Se hacía el anochecer cuando se generalizó el
combate en ambas orillas del río Pueblo Viejo. El Equipo de Combate del GAM 5
contraatacó y persiguió al enemigo que huía, apoyado por helicópteros de
Aviación de Ejército a órdenes del entonces Capitán Arturo Grandineti; logrando
abatir a 3 guerrilleros e hiriendo a varios más. El resto de los insurgentes se
dio a la fuga aprovechando la oscuridad. En el contraataque resultaron también
heridos el entonces Subteniente Daniel Arias y el Cabo 1ro Orellana.
Después de su
bautismo de fuego, la Fuerza de Tarea "Chañi"
(RIM 20 y GAM5) cambió el nombre, pasando a denominarse Fuerza de Tarea "Capitán Cáceres" en homenaje
al héroe muerto en combate, sepultado en la bandera celeste y blanca, con su
gorra y sable de Oficial, ascendido
posteriormente a capitán. El Equipo de Combate/GAM5 cambió su nombre por el de "Pueblo Viejo" recordando el
lugar del primer combate de la “Operación
Independencia”. Recuerden que ese 14 de febrero nos convertimos rápidamente
en “infantería de monte”, sin olvidar
nuestro origen de “artilleros de
montaña”. Fue un rápido, costoso y doloroso aprendizaje en medio del
combate.
Para nuestras tres
bajas de combate, nuestra admiración, agradecimiento y reconocimiento.
Admiración, porque
demostraron ser verdaderos soldados argentinos que supieron entregar su
humanidad por la PATRIA. Agradecimiento, porque sus actitudes quedaron como
ejemplo de ciudadanos responsables, íconos de la defensa de nuestro sistema
Republicano, Representativo y Federal.
Reconocimiento,
porque son arquetipos de hombres leales al juramento que, algún 20 de junio,
realizaron ante la bandera celeste y blanca de “defenderla hasta perder la vida”, y así lo hicieron.
Con la idea que
seguramente pudiese ser demasiado reiterativo, les comento que aún hoy me duele
el recuerdo del momento en que, esa noche, después del combate, pasamos por los
"Canchones" de Monteros
donde se realizaban los bailes de Carnaval y la gente bailaba entre risas, arrojando serpentinas y papel picado,
mientras nosotros pasábamos en un silencioso y respetuoso homenaje a nuestros
camaradas caídos unas horas antes cuando nosotros "bailábamos otra música" mientras nos arrojaban, no papel
picado sino proyectiles de fusiles,
escopetas, ametralladoras y granadas de mano. La gente de Monteros desconocía
nuestro "baile". Peor fue
durante la guerra de Malvinas, el país miraba el Mundial de Futbol por TV
mientras en las Islas morían argentinos. No fue como Monteros, que no conocía
aún el combate, la Argentina si conocía lo de Malvinas, pero no podía dejar de
ver "el fulbito".
También surge a mi
memoria el regreso a Buenos Aires, el 19 de febrero de 1826, de los pocos
Granaderos que cruzaron los Andes, liberaron Chile y Perú´. Ingresaron a la
ciudad por la tarde en medio de la indiferencia de la ciudadanía, nadie los
recibió ni les reconocieron la noble y abnegada tarea que realizaron. Setenta y
ocho hombres son los que llegaron a Buenos Aires. De ellos, siete estuvieron
desde la creación del Cuerpo de Granaderos por el General San Martín. Lo mismo
sucedió con el regreso de las tropas de Malvinas en 1982.
Hoy con dolor observo
que 44 años después de nuestro bautismo de fuego, la Argentina sigue igual,
insensible, individualista e incriminadora.
Ojalá este 14 de
Febrero los habitantes del pueblo tucumano de “Capitán Cáceres” (ex Yacuchina) rindan un justo homenaje al héroe
de quien hoy llevan su nombre, héroe que murió como sólo lo pueden hacer los
hombres valientes, dando la vida por el camarada herido.
Aún conservo,
preservado en un pequeño sobre de plástico, el escapulario de la Virgen del
Carmen que nos entregaron las monjas Carmelitas descalzas de Río Blanco (Jujuy)
a pedido de nuestro Jefe de GAM 5, el entonces Tte. Cnl. José Eduardo Durand
Cornejo y nuestro Capellán Monseñor Germán Mallagray, quienes nos acompañaron
en las patrullas a los montes y cerros en varias oportunidades.
Nuestro homenaje al
heroico Capitán Héctor Cáceres y para los valerosos y sufridos Teniente Coronel
(R) Rodolfo Richter, Capitán (R) Daniel Arias y Sargento 1º (R) Orellana.
Mi afectuoso
saludo a todos los suboficiales del EC
que lucharon con patriotismo, lealtad y profesionalismo. Al Suboficial Mayor
(R) Carlos Pereyra, el Encargado del Equipo de Combate, mi reconocimiento por
su abnegación y el cuidado que realizaba por la salud física y psíquica de todo
el personal, de Oficiales, Suboficiales y Soldados, inculcándoles
permanentemente su optimismo, fe y esperanza.
También, mi
reconocimiento a todos los valerosos jóvenes soldados jujeños y salteños que
combatieron ese día. Entonces tenían 20/21 años, hoy son dignos ciudadanos de
64/65. De cada uno recuerdo su cara y su apellido.
Como todos los años,
quiero saludar, en particular, a los Oficiales que estaban ese 14 de Febrero en
Pueblo Viejo, los Sres. Coronel (R) Julio Bidone, Teniente Coronel (R) Horacio
Marengo y Teniente Coronel (R) Aldo H. Martínez Segón, quienes, como yo, hoy
somos Prisioneros de Guerra y Presos Políticos por causas inventadas en otros
años.
Me despido de todos
los integrantes del "Equipo de
Combate GAM 5" evocando y reiterando una frase que escribí en mi
camarote de la prisión de Güemes (Salta) el 17 de agosto de 2015; que dice: "Con orgullo estoy donde y como estoy,
sólo por haber sido lo que fui, lo que soy y lo que siempre seré, un OFICIAL
DEL GORIOSO EJERCITO ARGENTINO".
Sigamos llevando
adelante la defensa de la PATRIA desde y como cada uno de nosotros pueda.
CAMARADAS, EL COMBATE NO HA TERMINADO.
¡¡SOLDADO,
NUNCA TE ARREPIENTAS NI PIDAS PERDON POR DEFENDER A LA PATRIA!!
Equipo de Combate GAM
5: ¡¡FIRMES!! ¡¡SUBORDINACION Y VALOR!!
¡¡VIVA LA PATRIA!!
Año 1975, Capitán.
Jefe de Equipo de Combate GAM 5
Año 2019, Cnl (R) Prisionero de Guerra
PD: "HAN CONVERTIDO LA VENGANZA EN ESTA
PSEUDO JUSTICIA".
NOTA: Las imágenes no corresponden a la nota original.
NOTA: Las imágenes no corresponden a la nota original.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No dejar comentarios anónimos. Gracias!