Desde la llegada de Hugo Chávez al poder, el régimen castrista comunista de Cuba ha
tenido una enorme influencia y sin precedentes sobre el país venezolano.
Podemos afirmar -en
vistas a la situación de sufrimiento del pueblo venezolano- que el mismo ha sido sometido a la pobreza, al fracaso, a la falta de libertad y al mayor
maltrato de los derechos humanos por el gobierno
ilegítimo de Nicolás Maduro.
Ese invento que Chávez
llamó Socialismo del Siglo XXI e
importó a otros países de la región, siempre fue sostenido por los más altos mandos
de las Fuerzas Armadas y de Seguridad venezolanas; algunos generales corruptos que usufructuaron el
poder en su propio beneficio y a expensas del latrocinio, narcotráfico,
violencia y la expoliación más grande de la historia sobre el pueblo de
Venezuela.
A diferencia de lo
ocurrido en la hermana nación caribeña, en la República Argentina en los luctuosos
años 60 y 70 sus Fuerzas Legales combatieron y aniquilaron a las
organizaciones político-militares que pretendieron alzarse con el poder del
estado a través de la violencia terrorista.
Gracias a esos Soldados, que se jugaron la vida, esta nación no cayó bajo las garras del comunismo ibternacional.
Gracias a esos Soldados, que se jugaron la vida, esta nación no cayó bajo las garras del comunismo ibternacional.
En 1985 se llevó a cabo el histórico juicio a las Juntas Militares, sus máximos responsables jamás fueron sentenciados por delitos de lesa humanidad y/o genocidio… sin embargo hoy sus más jóvenes subordinados de esa época -que además eran los de menor jerarquía y sin poder de decisión alguna- se encuentran sometidos a ser investigados por supuestos delitos de lesa humanidad y en el marco de un proceso de persecución, venganza y exterminio, donde se continúan repitiendo en forma sistemática infinidad de irregularidades jurídicas, instrumentadas en el ámbito de una justicia prevaricadora.
Cualquier persona con un micrófono o pluma en la mano emplea el calificativo de genocida o milico en forma general, despectiva e indiscriminadamente al referirse a las Fuerzas Legales de la Nación.
Durante la pretendida “Década Ganada”, con los Kirchner en el poder, estuvimos a un paso de transformarnos en un país del Socialismo del Siglo XXI. El pueblo aprendió la lección y le cerró las puertas a esa posibilidad. Hoy por la pesada herencia recibida, el latrocinio sistemático de los tres gobiernos del mismo signo y errores de gestión del actual gobierno elegido democráticamente… otra vez estamos al borde del abismo. Dios nos ilumine a la hora de elegir el camino que nos lleve, de una vez por todas, a ese destino de grandeza que soñaron nuestros ancestros.
Cualquier persona con un micrófono o pluma en la mano emplea el calificativo de genocida o milico en forma general, despectiva e indiscriminadamente al referirse a las Fuerzas Legales de la Nación.
Durante la pretendida “Década Ganada”, con los Kirchner en el poder, estuvimos a un paso de transformarnos en un país del Socialismo del Siglo XXI. El pueblo aprendió la lección y le cerró las puertas a esa posibilidad. Hoy por la pesada herencia recibida, el latrocinio sistemático de los tres gobiernos del mismo signo y errores de gestión del actual gobierno elegido democráticamente… otra vez estamos al borde del abismo. Dios nos ilumine a la hora de elegir el camino que nos lleve, de una vez por todas, a ese destino de grandeza que soñaron nuestros ancestros.
Es
hora de sin odios, ni venganzas, de una mirada superadora de la violencia que
nos mantiene anclados en el pasado; el país necesita una Ley de Pacificación y
Concordia Nacional.
Sin desmeritar las denuncias presentadas por los
familiares de los 755 presos políticos, entre quienes se encuentran 155 de
nuestros hermanos de armas, la narrativa de la madre de nuestro compañero Capitán
de Navío Luis Humberto De la Sotta Quiroga, segundo comandante de Bricomar del
Apostadero Naval de Turiamo, es una de las más espeluznantes que he escuchado
hoy ante la Alta
Representante de las Naciones Unidas para la defensa de los derechos humanos, Michelle
Bachelet.
Escucha el testimonio en el siguiente video:
Independientemente
del informe que resulte de esta visita, el pueblo venezolano y la opinión
pública internacional son testigos de la barbarie usurpadora solo comparable a
las acciones de Estado Islámico (ISIS) en el Medio Oriente.
Por lo menos, la
visita a Venezuela de la Alta
Comisionada para los DD.HH. Michell Bachelet, sirvió para destapar y
ampliar la verdad oculta de las operaciones cubiertas y encubiertas de los
esbirros de la DGCIM y del SEBIN violatorias de los DD.HH. de los venezolanos y
cuya responsabilidad directa recae sobre los generales del ejército Vladimir Padrino López, Iván Rafael Hernández
Dala y Gustavo González López.
Ignoramos si la AN
presentó a la Alta Comisionada Michelle
Bachelet, un compendio sobre las muertes causadas por francotiradores
apostados por las dictaduras de Chávez
y Maduro ocurridas durante las
sangrientas represiones en contra del pueblo durante las manifestaciones de
2002, 2014 y 2017, ejecutadas por la GNB, el SEBIN, la DGCIM y los colectivos
armados del régimen, quienes emboscaron y masacraron a decenas de venezolanos
durante esas acciones criminales.
Mientras, en el
contexto de la campaña para un nuevo periodo presidencial, Donald Trump, en una
entrevista en Miami, enfatizó el pasado viernes 21 de junio, que el mayor
causante de la crisis humanitaria que padecen los venezolanos es el régimen
cubano, quien mantiene una fuerza de 25.000 hombres en el país, por el cual ha
sido sancionada severamente por la Casa Blanca.
Trump
lo tiene claro: Cuba es el mayor culpable de la crisis en Venezuela (VIDEO)
Ojalá estos nuevos
hechos sirvan para fortalecer la unidad opositora y reorientar la lucha opositora
con un brazo armado que coadyuve a despejar los caminos hacia la libertad y la
democracia.
Caracas, 22 de junio
de 2019
@rdbustillos
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