Perdidos comos turcos en la neblina

Pasó el “día tan esperado” y nos dejó un “resultado electoral esperado”… la reelección  de Cristina Fernández Vda. de Kirchner, con una diferencia de votos excesiva ante una “oposición pérdida como turco en la neblina”.

El origen de esta frase no tiene que ver con una explicación climática. Todo lo contrario, en España, antiguamente, al hecho consumado de emborracharse se lo denominaba "agarrarse una turca". Y con el tiempo, el decir popular, transformó e involucró en la frase a los pobres euroasiáticos. Quién puede estar más perdido que un borracho en la neblina? Nadie. Es por ello que desde allí nace, para los que se encuentran desorientados o sin rumbo, esta curiosa frase.

La presidente reelecta tuvo el mejor discurso al cierre de su campaña electoral y anoche al festejar su triunfo ante una nutrida concurrencia pública y la Cadena Nacional de Comunicación… en cambio los derrotados líderes de la oposición fragmentada con un discurso muy pobre, algunos festejaban un lejano segundo lugar o haber ganado en una aislada provincia del interior. Ninguna autocrítica que menguara sus errores que nos llevaron a este resultado electoral.

Como pueblo que ha aceptado definitivamente vivir en democracia como estilo de gobierno, no podemos menos que reconocer la legitimidad de la victoria electoral y el poder que nace de las urnas. Ayer manifestamos nuestros deseos “para mejorar la convivencia social de todos los habitantes de nuestro bendito país, en un plano de absoluta igualdad de oportunidades, igualdad ante la ley si ningún tipo de discriminación y fortalecimiento de las instituciones que deben velar por nuestro destino y contrato social, como pueblo que ya eligió vivir en democracia” y “que la humildad y sabiduría de los ganadores de la contienda electoral, les permita abarcar a toda la sociedad y unirla de una vez para siempre, hasta lograr la Pacificación Nacional Definitiva que nos permita alcanzar la felicidad como país”.

Anoche después de escuchar un discurso de la presidente reelecta que llamó a la unidad nacional y al fortalecimiento de las instituciones, muy similar al que pronunciara al festejar su primera elección en el 2007… se nos conmovió el alma, por el temor que no cumpla con esas promesas que nos llevaron una vez más a la desunión y avasallamiento de las instituciones.

Esperamos que los ganadores no se confundan en medio de su contundente resultado electoral, el pueblo los eligió para administrar solo durante otro período de 4 años más, no se le otorgó al Frente para la Victoria la suma del poder público. No se suprimió la división republicana de los tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial), ya en el pasado muy reciente el poder de turno dio muestra de su ambición de poder, con la mayoría en ambas cámaras legislativas transformó al Congreso Nacional en una “escribanía” y al Poder Judicial lo sometió a la “obediencia debida”. Nó señores, nuestra Constitución Nacional deja bien claro que  “La Nación Argentina adopta para su gobierno la forma representativa republicana federal”.

En el 2009 el electorado le dio un mandato a la “oposición”, ese contrato social fue incumplido por los líderes políticos que ganaron en esa elección, no cumplieron las expectativas en ellos depositadas, fueron incapaces de unirse y trabajar en equipo por el bien del país, volvieron los tránsfugas y ayer el pueblo les pasó la factura. Es hora que recuperen el “rumbo perdido”, es hora que hora que aparezca una opción mejor, es hora que nos devuelvan las esperanzas de un futuro mejor, es hora que cumplan con la historia y las generaciones futuras. Nosotros ya perdimos todo eso, pero ansiamos para nuestros hijos y nietos una Nación en paz, en libertad, donde todos sean iguales ante la ley y se termine con la venganza impiadosa.

¡Al gran Pueblo Argentino salud!