"Los
fenómenos de mercado, cuando existen,
es un error ocultarlos". José "Pepe" Mujica
es un error ocultarlos". José "Pepe" Mujica
Me pregunto, cada
día, a qué se debe que el Gobierno calle u oculte las cosas que hace bien; por
supuesto, no todo lo que hace es correcto pero, al no hablar de los hechos
positivos, sigue dando pasto a la peor oposición, ganando quejas de sus propios
votantes, y permitiendo que la prensa sólo hable de los aspectos más incómodos
de la realidad, que también los hay y muchos.
El lunes pasado, en
el diario La Nación, un economista de nota y el mayor experto en consumo de
nuestro país, Guillermo Oliveto, publicó una excelente y exhaustiva nota a la
que tituló "Para evaluar mejor,
datos duros antes que las sensaciones" (https://tinyurl.com/y76rb8ry), cuya
lectura considero imprescindible para que todos entendamos qué está sucediendo
realmente en la economía nacional y evitemos caer en especulaciones, casi
siempre mal informadas, cuando no mal intencionadas.
Obviamente, no soy
quien para criticar la política de comunicación de la Casa Rosada porque sus
actuales inquilinos ganaron, desde 2007, elecciones imposibles mientras que yo,
la última vez que lo hice, fue en el centro de estudiantes de mi facultad. Pero
me parece que debiera informar mejor y más consistentemente sus logros porque,
al no hacerlo, permite que el escepticismo permee en la ciudadanía, sobre todo
en la clase media urbana, que fue su mayor sostén en las contiendas
electorales.
Como formo parte de
ella, escucho todos los días quejas de aquéllos que, durante el kirchnerismo,
gozaron de masivos subsidios a la electricidad, al gas y al transporte,
mientras engrosaban las multitudinarias filas de quienes reclamaron una
jubilación para la cual no habían hecho aportes, aunque destinaran su magro
estipendio mensual a pequeños gustos absolutamente superfluos.
La clase media
porteña, egoísta e hipócrita, nunca tuvo en consideración que al recibir todas
esas injustificadas prebendas, de las que no gozaban quienes habitan en el
interior del país, permitía que la economía fuera depredada y que los recursos,
siempre escasos, no alcanzaran para mejorar la situación de miles de
compatriotas que sobreviven en la pobreza pero que, con sus impuestos,
habilitaban el despilfarro.
En cambio, la clase
humilde del conurbano, en especial del bonaerense, está comenzando a notar que
se realizan todos los días obras que, literalmente, están cambiando sus vidas.
Para quienes han chapaleado en el barro de sus calles para ir a trabajar, han
debido pagar sumas estrafalarias por el gas que se regalaba a los hogares más
acomodados del país, que carecían de cloacas y, en muchos casos, de agua
potable, esos signos mínimos de elevación social están llegando.
Por supuesto, no creo
que, de un día para otro, dejen de votar al peronismo que los sumergió en esa
condición y en ella los mantuvo desde que asumiera sus destinos en 1987. Sólo
una extraña combinación de factores permitió que los planetas se alinearan en
2015 y, bajo el mando del mariscal Anímal Fernández, fueran expulsados de su
eterno baluarte. Pero es altamente probable que, a partir de 2019, con el
monstruoso impacto que provocará la coparticipación federal que recuperó María
Eugenia Vidal, las reminiscencias de un pasado imaginario y feliz dejen de
tener peso.
Si eso sucede,
comenzará sin duda un nuevo país, y el viejo y populista PJ será reemplazado
por un indispensable partido moderno, democrático y respetuoso de las
instituciones; habremos dado así un fenomenal paso adelante como nación
civilizada.
En el ínterin,
todavía nos queda mucho por sufrir y muchas culpas por pagar. Si bien quienes
condujeron al peronismo a la mayor derrota desde aquélla que le impuso Ricardo
Alfonsín en 1983, están hoy contra las cuerdas del ring judicial y muchos ya
miran la pelea desde la cárcel, mientras varios más se presentan todos los días
para acompañarlos tras las rejas, lo cierto es que todavía conservan bastante
poder de fuego, en especial en la calle.
Hugo Moyano se ha
quedado más solo que Adán en el Día de la Madre, sus colegas lo han abandonado
en masa y el único apoyo que aún le resta son las deshilachadas tropas del
kirchnerismo y algunos movimientos sociales que, a su vez, lo usan para
intentar ganar fuerzas para sus propios reclamos de planes, para mantener e incrementar
el latrocinio que aplican a los beneficiarios finales. Sin embargo, seríamos
estúpidos si pusiéramos en duda la capacidad del camionero y de los piqueteros
de complicar la vida de los argentinos, tanto como si negáramos a Roberto
Baradel su peso a la hora de sacrificar a los chicos en el altar del poder
sindical de los "trabajadores de la
educación", o a Sergio Palazzo idénticos propósitos con los bancarios
como huestes.
Agradezco a Oliveto,
ya que me permite conservar y explicar el optimismo por el futuro que me
embarga, aún cuando todavía muchos la están pasando mal. Pero alguna vez,
aunque sea una sola, los argentinos deberíamos pensar que no hay milagros en la
economía, como no lo hay en la educación ni en la cultura, y que cada paso que demos,
por pequeño y doloroso que sea, nos acercará a la meta.
Ésta no puede ser
otra que volver a ser un país normal, serio y confiable, capaz de sentarse en
cualquier mesa de negociación, comercial o política, y ser respetado por el
resto de las naciones. Llevamos añares sin que eso suceda, pero también en ese
terreno se nota un cambio positivo.
Para concluir, cumplo
en agradecer también a Cristina Elisabet Fernández, viuda de Kirchner, que me
ha hecho recuperar mi capacidad de asombro -una característica de los niños-
esta semana. La actual Senadora, que ya tiene tres procesamientos confirmados
por tres instancias y que sólo permanece en libertad por el escudo humano que
construyeron sus colegas de casi todos los partidos, presentó un proyecto de ley
para que se expulse de sus cargos, retroactivamente, a los funcionarios que
tengan dinero en paraísos fiscales. He visto el texto y, sorprendemente, no
contiene explicación alguna para la injustificada y sospechosa escala técnica
que realizara en las islas Seychelles, un paraíso no exclusivamente
paisajístico, ni para el viaje a Angola, segundo productor de diamantes del
mundo.
Bs.As., 10 Mar 18
Enrique
Guillermo Avogadro
Abogado
E.mail: ega1avogadro@gmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No dejar comentarios anónimos. Gracias!