Dr. D. Julio Alfonso Correa -10 de
junio de 2020
Con inmenso dolor comunico el fallecimiento del Dr. D. Julio Alfonso Correa quien como pocos ocupo parte de su vida, durante mucho tiempo y asiduamente, llevando consejo, consuelo, comprensión y caridad, visitando en los penales y o domicilios a los Uniformados y Civiles privados de la libertad por haber defendido a la Patria.
Su fidelidad a la obra de misericordia
corporal lo llevara sin dudas a estar junto a Dios.
Cnl (R) Jorge Toccalino
EN MEMORIA
11
de junio de 2020
Dr. D. Julio Alfonso Correa
Julio Alfonso Correa –JAC-
realizó una tarea apostólica con los PP para que nosotros nos sintiéramos
amados y comprendidos .Lo hizo casi sin notarse .Fue un elegido evidentemente
por Dios, su Hijo y el Espíritu Santo
Hizo
lo que hizo solo por la su virtud misericordiosa de dar amor. En ese orden
también recuerdo al Cnl Horacio
Gulielmone.
Aprecio
que el caso JAC merece un pequeño relato de cómo nació mi amistad con él a fin
de que comprendan los que lo lean, desde cuándo y hasta donde llegó ese
apostolado laico que ejecutó por la Patria. Es por ello que debo comenzar por
el principio.
Todos
recordaran que casi inmediatamente al movimiento de Semana Santa ocurrió el de
Villa Martelli encabezado por mi compañero el Cnl Mohamed A Seineldin al cual
me uní por un llamado de Oficiales subalternos. Dicho movimiento culmino con el
famoso Acuerdo de Villa Martelli (04 Dic 1989-16 00 Hs) entre el JEMGE, el Cte
Br C Bl I ,mi compañero y yo.
El
acuerdo establecía cinco puntos, obviamente aceptados por los presentes en la
reunión -el que escribe estas líneas es el que los redactó- y que en lo que
interesa uno de ellos era la reivindicación de la lucha contra la subversión y
de la gesta de Malvinas (en aquellos momentos vivíamos intentos de “desmalvinización”).
Increíblemente,
aunque fue un pedido explícito del citado compañero mío, fue el único que fue
arrestado y lo cumplió en el Cpo Ej I -cuarteles de Palermo-. Desde allí se
comenzó a gestar un grupo de civiles y militares (cito a algunos que recuerdo y
porque han fallecido) Don Rogelio Frigerio, Jorge Camus, el Mtro. o ex Mtro. de
Economía Mondino, el periodista Moyano y, por supuesto Julio Alfonso Correa con
la finalidad de forzar el cumplimiento de lo acordado en el Acuerdo de Villa
Martelli.
Las
reuniones se hacían todos los jueves en el estudio que con otro abogado JAC
había formado (Calle Viamonte y Rodríguez Peña). Es decir, aprecio, allí nació
el apostolado que realizó JAC hasta su muerte, amén de otras tareas que realizó
anteriormente siempre ligadas a su querida Patria.
Dicho
Grupo por razones que no vienen al caso resolvió disolverse y lo hizo a través
de un documento -que aun poseo- y entregado en mano por Don Rogelio Frigerio y
el suscripto.
Pasó
el tiempo y ocurrió lo que todos saben, otro movimiento militar -producto del
no cumplimiento de los anteriores- sucesivos presidentes de la Nación, el “nunca más” y juicio a las Juntas y
comienzo de la era K que, apoyándose y haciendo uso político del caso, comenzó
con el tema de los DDHH a partir del cual empezamos a caer presos y, con
nosotros la aparición de patrióticas organizaciones e individualidades tal como
la de JAC inclusive, sin dejar su pertenencia y lucha desarrollada por la
AAJyC.
Digo
individualidades pues JAC, por ejemplo, y entre otros, estableció conmigo una amistad
muy profunda que llego hasta nuestras familias.
JAC
visitaba todas las semanas Devoto. Ezeiza y Marcos Paz Recuerdo que era uno de
los más esperados pues sus juicios de valor y expresiones colmaban de esperanza
a los cautivos.
En
domicilio, conmigo y otros que conozco, continuo sus visitas, en mí caso todos
los jueves .Tuve un pequeño periodo de excarcelación donde me exigieron la
presentación de avales de dos propiedades, una de ellas fue la casa de JAC.
Sin
poder precisar la fecha un día me dijo que dejaba el estudio de abogacía que
había conformado con otro socio y que se iba a dedicar a tiempo completo a la
tarea de llevar consuelo, comprensión y esperanza a los penales. Y así lo hizo.
Siguió
su apostolado hasta que un día volviendo del penal de Ezeiza tuvo un accidente
automovilístico muy grave y tuvo un largo periodo de restablecimiento; pero
luego de ello retorno al apostolado que Dios le había inspirado. No obstante,
es cierto, lo vi declinar físicamente en las visitas que me hacía pero nunca en
sus convicciones fundadas en profundos análisis. Espació las visitas que me
hacía a tal punto que desde antes del último verano no lo vi más aunque
manteníamos diálogos por Internet y o me contestaba sobre los consejos que le
pedía.
Ayer
al mediodía recibo un llamado de su hija mayor -como si lo hubiera presentido
lo primero que dije fue: “¿qué paso?”-
y allí es cuando me da la noticia que su padre había fallecido. Quedé anonadado
por la noticia y desconsolado por la pérdida del amigo de la vejez (así nos llamábamos).
Como
podrán apreciar solo Dios pudo darle a JAC la fuerza para desarrollar un
apostolado en ayuda de todos aquellos que estuvieron y o están privados de la
libertad por haber defendido a la Patria de las garras de un comunismo
vengativo,
Su
tarea apostólica laica no nació de la nada como he tratado en mi relato y que
es mínimo comparado con su amor a Patria y amor al prójimo.
Querido
Julio en nombre de los Uniformados y Civiles presos te pido que inspires a
otros, desde el cielo tan merecido y ahora que estas tan cerca de Dios, para
que tu sentir por la Patria se cumpla.
Mi
consuelo está en nombre del Señor, en la seguridad que estarás cobijado y feliz
por tenerlo a la vista.
Fuiste
casi un hermano y alguna vez creo habértelo dicho y muchos seguramente tendrán
ese sentimiento hacia ti.
¡HASTA
LA VISTA!!!!
Bs As ,11 De mayo de 2020
Cnl (R) Jorge Toccalino
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