Documentos
5 de junio de 2014
Declaración del Club Político Argentino
El gobierno ha creado una Secretaría de
Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional. No es la primera vez que
la actual administración toma intempestivamente decisiones que ponen a las
instituciones en función de la política chica, como es el caso de esta
estrafalaria coordinadora del pensamiento nacional. Poca fe le tienen sus
creadores al pensamiento nacional, si creen que el mismo debe ser coordinado,
ser sometido al corset de la burocracia pública. Si se toman en serio las
nuevas funciones –lo que sería una ingenuidad a toda prueba–, los que vayan
allí ya saben lo que les espera: pensar por un salario, en un ambiente
institucional vertical.
Nada prometedor, dependiendo de lo que se
entienda por pensamiento nacional. Si se entiende por tal al conjunto,
abarcador, amplio, diverso y plural de las corrientes de pensamiento
(incluyendo a los que piensan desde ninguna corriente, también) que han
florecido y florecen según distintas tradiciones y modos de vincularse con el
mundo, entonces tienen por delante una tarea imposible. ¿Cómo podría ser
coordinado estratégicamente el pensamiento nacional así entendido?
Pero existe una posibilidad más ominosa que,
dados los antecedentes del gobierno, no puede descartarse: que el pensamiento
nacional sea lo que cierto populismo entiende habitualmente por esto. Es decir,
la delimitación de un campo, convenientemente llamado de “lo nacional”, que
deja fuera todo lo que no le responde, todo lo que no se deja integrar en una
esfera homogénea. Si así fuera, puede mirarse con otra luz la decisión del
gobierno: busca la producción del pensamiento políticamente administrado. Pero
hay motivos para la tranquilidad, ya es demasiado tarde para esa aventura: la
sociedad piensa por sí sola.
Comisión Directiva
Club Político Argentino
Buenos Aires, 5 de junio de 2014
FUENTE: http://www.clubpoliticoargentino.org/gracias-la-sociedad-piensa-por-si-sola/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No dejar comentarios anónimos. Gracias!