El Blog de Carlos Alberto Montaner
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millones los lectores que semanalmente se asoman a sus columnas y artículos.
20 February 2015
por Ricardo Angoso
@ricardoangoso
La guerra entre las
fuerzas militares del gobierno de Ucrania y los separatistas prorrusos apoyados
por Moscú en el Este de este país está llegando a su fin y todo parece indicar
que las autoridades de Kiev tendrán que aceptar una rotunda y contundente
derrota militar. A los más de 8.000 muertos que ya podría haber, entre civiles y
militares, mayoritariamente ucranianos, los 9.000 heridos y seguramente dos
millones de desplazados, habrá que añadir la casi secesión del Este de Ucrania
o, al menos, de las provincias de Donetsk y Lugansk.
Ucrania ha perdido
decenas de naves aéreas, centenares de vehículos militares de todos los tipos,
miles de soldados y oficiales y, sobre todo, la iniciativa militar y la capacidad
para sostener una guerra inducida, liderada y dirigida por Rusia. Cada día que
pasa, Ucrania es más débil, mientras que las fuerzas pertrechadas y armadas por
Moscú se muestran mucho más audaces, tienen la iniciativa sobre el terreno y
consiguen importantes victorias.
Cuando la derrota en
la guerra es evidente, es hora de aceptar las realidades sobre el terreno y
dejar paso a la política aun sacrificando lo ya perdido en aras de no seguir
consumiendo más territorios en una contienda desigual, impuesta desde fuera y
en donde los ucranianos se han quedado dramáticamente solos en el planeta.
No hay nada que
hacer, la guerra está dramáticamente perdida para Ucrania por cinco grandes
errores de Occidente.
Primer
error
Subestimar que Rusia
no iba a intervenir si Ucrania daba un giro en su política exterior hacia la
Unión Europea (UE) y la OTAN. Los occidentales no fueron capaces de prever,
tanto antes como después del giro europeísta de Kiev, que Rusia no se quedaría
de brazos cruzados y aceptaría dejar desprotegido este flanco. Y, muchos menos,
en manos de la OTAN. Ucrania estaba “filandizada”
desde 1994, en que en una no acertada decisión puso todas sus ojivas nucleares
en manos de Moscú. Siguiendo la “dóctrina
Brezhnev” o de la “soberanía limitada”,
hay que asumir que Ucrania tenía una independencia condicionada a los intereses
geopolíticos de Rusia, tal como ocurrió en los tiempos de la extinta URSS con
los países del Pacto de Varsovia, y Occidente no estaba dispuesto a ir más allá
de las sanciones económicas en su confrontación con Moscú. Hubiera sido mejor
haberle dicho las cosas claras a Kiev desde el principio y no haberle animado en
una deriva europeísta que degeneró en una guerra.
Segundo
error
Haber reconocido de
facto la anexión de Crimea por parte de Rusia. Nada más independizarse Crimea
y, a renglón seguido, llegar el reconocimiento y súbita anexión por Rusia de
este territorio, Europa y los Estados Unidos entraron en estado de shock. Quizá
si hubiera habido una condena más firme, un apoyo más claro de todo Occidente a
la integridad territorial de Ucrania y una respuesta en todas las instituciones
internacionales mucho más dura, es más que seguro que Rusia no hubiera seguido
en sus pretensiones por alimentar los fuegos secesionistas del Este de este
país. Pero no fue así y el mensaje fue nítido para Moscú: ¡sigan adelante
muchachos!
Tercer
error
Haberse mostrado
divididos, desorientados y poco decididos a una acción rotunda y tajante. Como
en la crisis siria, los europeos y los Estados Unidos se mostraron divididos,
muy desorientados y poco decididos a emprender una acción militar para salvar a
Ucrania, y Moscú, rápidamente, entendió la lección: nadie intervendría y, mucho
menos, pondría tropas sobre el terreno para salvar a Kiev de su aciaga suerte.
El presidente ruso, Vladimir Putin, un tipo sagaz, ágil y rápido en sus reflejos,
comprendió a la perfección la situación y puso a la maquinaría militar en
marcha. La inacción de unos, en este caso europeos y norteamericanos,
contribuyó a la acción de otros, en este caso los rusos, que no ocultaban su
apetito geoestratégico por esta zona del mundo poblada mayoritariamente por
rusos.
Cuarto
error
Optar por una
política errónea sin entregar armas y pertrechos militares a las fuerzas
ucranianas. Mientras Rusia avanzaba sobre el terreno, conquistando territorios
de la mano de sus milicias prorrusas, los europeos optaron por no dar el paso
de entregar armas y pertrechos militares a los ucranianos, mientras que los
norteamericanos se mostraban dubitativos y poco convencidos a la hora de dar
también ese paso. Creían, ambos, que la diplomacia y las sanciones económicas
serían suficientes para contener a Moscú, pero no fue así y Rusia decidió seguir
implementando la vía militar. Cuando no se sabe ni se conoce la historia, como
les pasa a muchos de nuestros dirigentes políticos, ocurren estas cosas. Moscú,
más concretamente Putin, han actuado siguiendo el mismo guión que en las crisis
de Transnistria, Osetia del Sur y Abjasia. El mismo guión, los mismos
resultados y la misma película.
Quinto
error
No haber percibido
las verdaderas intenciones de Putin desde el comienzo de la crisis. Alemania y
Francia, pero más bien esta última nación, han creído desde el principio que
lograrían convencer a Putin para que se detuviese en su agresión a Ucrania y
cesase en las operaciones militares. Pero no ocurrió como preveían, sino que
Putin estaba jugando al ratón y al gato con Europa, más concretamente con la
UE, y tratando de dividir a Occidente, en una suerte de sainete en que
representaba a su vez al policía bueno y al policía malo. El Este de Ucrania, más
concretamente las provincias Donetsk y Lugansk, será anexionado de facto por
Rusia a pesar no contar con el reconocimiento internacional para realizar tal
acción. El deficiente liderazgo norteamericano en esta crisis, las divisiones
en el bando europeo y también dentro de la OTAN, la mala preparación del
ejército ucraniano y el escaso apoyo internacional a las pretensiones de Kiev
por preservar su territorio, junto con otros factores, han llevado a esta
inesperada victoria de Rusia en esta crisis. Lo que ahora está por ver es qué
consecuencias tendrá para la economía rusa y para su proyección en el mundo
esta contienda, pero esa es otra historia para otro momento.
FUENTE:
http://www.elblogdemontaner.com/los-cinco-grandes-errores-de-occidente-en-la-guerra-de-ucrania/
NOTA:
Las imágenes y destacados no corresponden a la nota original.
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