El privar a oficiales
militares de su grado y situación de revista por el hecho de ser portadores de
apellido constituyó, por parte del anterior gobierno, una arbitrariedad e
injusticia inaceptable e impropia de un gobierno constitucional. Fui director general
de Personal Naval. Tuve los legajos de esos destacados oficiales navales en mis
manos y doy fe de su idoneidad profesional y hombría de bien. No recuerdo, en
mi larga carrera naval, haber sido testigo de una decisión aberrante similar.
Restituir a esos oficiales su grado y antigüedad enaltece al actual ministro de
Defensa y abre una ventana de esperanza en pro de prestigiar a las FF.AA. Con
la mayor humildad, que nace de mi orgullosa condición de marino y soldado,
agradezco al equipo de gobierno.
Héctor
Julio Álvarez Vicealmirante (RE)
DNI 4.630.003
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