DUDA
RAZONABLE
El doctor Emilio
Cárdenas, en su artículo del miércoles último, vuelve sobre el tema -tomando de
ejemplo un juicio de crímenes aberrantes llevado a cabo en África en 2012-
puntualizando que el acusado no pudo ser tenido como culpable, toda vez que su
responsabilidad por los crímenes de que se lo acusaba no habían sido probados,
"más allá de toda duda razonable". Paradójicamente, en nuestro país,
en donde la parte acusadora (fiscal y querellante) y el propio tribunal han
dado muestras de "estar del mismo lado", cientos de presos políticos
son juzgados y condenados sin tener en cuenta el "principio de
inocencia" proclamado en la Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre y la Declaración Universal de Derechos Humanos, OEA y ONU,
respectivamente, encontrando siempre una "prueba falsa" que los
incrimine más allá de toda duda razonable.
Para el doctor
Cárdenas la presunción de inocencia está en los cimientos mismos del debido
proceso legal y su respeto forma parte del Estado de Derecho. La justicia
argentina lo ignora olímpicamente.
Daniel
Ojeda
DNI 12.715.532
TRASLADOS
El miércoles último,
en una nota en la sección Política, se hizo referencia a la objeción de
organismos de derechos humanos, como también del premio Nobel de la Paz, a uno
de los tantos traslados a que fueron sometidos en esta "década" los
militares que debieron actuar en los 70 contra el terrorismo. Una vez más queda
en evidencia el afán de venganza y odio de estas personas, que se contradicen
en los títulos que llevan. No resulta una concesión que ancianos enfermos
encarcelados sean destinados a prisiones cercanas a hospitales, sino una
precaución para evitar que mueran en los traslados.
Graciela
de la Villa
LC 6.072.464
SIN
DERECHOS
Con respecto a la
nota publicada por el señor director ejecutivo del CELS, Gastón Chillier,
quisiera manifestar que en los juicios de lesa humanidad, verdadero resultado
de idas y venidas de una justicia títere al servicio del poder político, se
recrean hechos de hace casi 40 años con una parcialidad manifiesta que ha
llevado a invertir la carga de las pruebas. Militares y policías que deben
demostrar su inocencia por el solo hecho de serlo. Fiscales y querellantes
presionan y amenazan arbitrariamente a jueces timoratos con la pérdida de
cargos obtenidos por el camino de la política y no del mérito. Son juicios
animados e impulsados por fuerzas no positivas que no cierran heridas en la
sociedad, sino que de ese modo las profundizan.
Señor Chillier: lo
invito a ir a la cárcel de Ezeiza. Ahí va a poder observar que gente de más de
70 años (enfermos, con cáncer, ciegos, en sillas de ruedas) están presos cuando
la ley 24.660 dice como requisito que una persona de mas de 70 años debe estar
en su domicilio. ¿Eso no es un trato diferencial y discriminatorio? Según la
página web de su organización, la función principal del CELS es trabajar en la
promoción y protección de los derechos humanos. Le pregunto en este caso. Los
derechos humanos, ¿dónde están? ¿Cómo están trabajando para que, en democracia,
se respeten sus derechos, se respete la ley?
Evidentemente para
este tipo de personas no hay derechos.
Malena
Gandolfo
DNI 30.366.197
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No dejar comentarios anónimos. Gracias!