Señor
Director:
Siempre
se afirmó que la Señora Presidente es decididamente opuesta al aborto. En
ocasión de que el país asiste a la jactancia de un agrupación a raíz de haber logrado quitar la
vida a un bebé viable gestado por una niña de 13 años violada por su padrastro,
sería una inmejorable oportunidad para expresar desde la más alta autoridad de
la República el repudio por el crimen
abominable de un ser inocente, que expresaría sin duda el sentir generalizado
del pueblo argentino, más allá de las distintas opiniones o preferencias
políticas.
"Privilegiados
sólo los niños" decía el General Perón. Aquí el único privilegiado parece
ser el violador, -que hasta donde sabemos sigue libre-; el único condenado y ejecutado, un niño inocente; y las ausencias
más significativas, las de muchos
supuestos defensores de los derechos humanos y
de la no violencia intrafamiliar, ausentes cuando se vulnera pública y
alevosamente el primero de los derechos humanos que es el de la vida,
quitándosela a un hijo, acto que
constituye además el máximo paradigma de la mencionada violencia intrafamiliar.
Santiago
Floresa
Juncal
al 1800
Capital
Federal
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