lunes, 18 de junio de 2012

PIÉRDASE TODA ESPERANZA EN ESTE INFIERNO


19de junio de 2012

Es muy difícil terminar de enumerar todo lo que está prohibido en este país de fantasía… porque son millares de libertades mutiladas.  Son libertades esenciales y  son también otras derivadas… que se perciben menos…

… y es muy penoso ver  todos los derechos constitucionales que están hoy completamente cercenados.
Fulminados, descogotados, arrancados…  y despostados como una res.

Solo con ver los containers apilados en el puerto basta para saber que esta olla a presión… por simple razonamiento… jamás puede terminar bien.

Porque, además…  y como si todo esto fuera natural… están robándonos a mansalva… y lo están haciendo a la luz del día…  por exclusiva acción y con la especial aquiescencia… de la gran fabuladora de este nuevo infierno.

La indignación y la impotencia, me llenan de enojo al querer contestar estas preguntas, en verdad retóricas, que desnudan lo elemental de la demasía:

Que derecho tiene esta mujer… a prohibir nuestra libertad?

Debajo de qué piedra ha salido... quien quiera quitar nuestros derechos ?

Qué es… más que nosotros… este conjunto de imbéciles para someternos ?

Qué superioridad divina o mágica muestran para descuajar mis garantías ?

Por cual razón…tengo que obedecer terribles violaciones constitucionales ?

En medio del pavoroso desdén que muestra el gobierno por las prioridades de Estado, su robo, su inoperancia y la inseguridad pública ya se espiralizan como una epidemia de peste bubónica…  a la vista y paciencia de todos.

El que se atreve a hablar de errores… o necesidad de correcciones  en este país,… o acaso a reclamar siquiera algo de equilibrio y sentido común… como retribución al salvajismo impositivo, de inmediato,  es un enemigo mortal.

Peor que eso…  es un fascista.   Es… a priori, un terrorista liso y llano.

Y acaso, en la verdadera concepción bonafinista de este gobierno, la óptica es mucho más recalcitrante todavía. Todos los que no la votaron son m…

Por lo dicho… en esta comarca… no vale otro modo para encontrar las causas de este verdadero infierno que se ha desatado….  que no sea poner la lupa sobre esta liturgia dogmático ideológica que fue implantada desde que  asumió la dinastía que personifica esta enciclopédica saqueadora … megalómana y campeona de la ordinariez.

Armaron hasta ahora… 4 planes de préstamos hipotecarios de latrocinio:

El primero… de hipotecas pequeñas.  Una mentira. Desapareció el dinero.

El segundo de cuota igual al alquiler. Plan inquilinos . Una mentira y un robo.

El tercero “Sueños Compartidos” Un desfalco brutal. Se robaron todo  .

El cuarto “El guantazo a la Anses”, para sacarle el dinero a los jubilados.

Hablemos del último ya que los otros ya están en los bolsillos de la banda.  

Un plan sólo para gente de 18 a 65 años     O sea … entiéndase bien :

Es con dinero de los jubilados y… justamente… ellos… QUEDAN AFUERA

Si no fuera trágico y cruel… sería gracioso…


Dígase aquí, en verdad…   si no dan ganas de conseguir unos petardos y adosarlos a los sobres de dinero que se están llevando para que no toquen dinero por unos añitos.

Hay algo tan mentiroso como el INDEC. El índice de inseguridad pública.

La culpa de la inseguridad, en este país, no la tiene,  ni la pobreza, ni la miseria, ni la falta de oportunidades, ni siquiera la educación falente.

No. La culpa, así como están las cosas,  la tiene exclusivamente esta fabuladora… que ya…  a estas alturas.. nos dice a los gritos que es la autora exclusiva de absolutamente todo lo que aquí ocurre y deja de ocurrir.

Y aún consigue rastreros, clementes, indulgentes y magnánimos que dicen como la insólita Laura Di Marco… que hay que respetar la investidura de esta refinada carterista.
Pero más que eso:  

Ella ha comprado aquella culpa. Lo ha hecho casi científicamente, con su singular mérito ideológico de baldío.

Su entendimiento con el poder, es un mañoso enfoque cualitativo de la vida y de la muerte que, en su práctica,  agravia los tuétanos del lenguaje escrito en su mandato constitucional.

El Estado como concepto, devenido de una asociación política, es tal, cuando su existencia real… y la validez de  sus leyes, están continuamente garantizadas dentro de un territorio determinado.

Y se halla taxativamente en la base magna de un Estado, que eso es así (y que es sólo así)  únicamente si existe la posibilidad real  de que el poder  se ejerza incluso con la aplicación o la amenaza de una regulada violencia física por parte de la dirección administrativa de ese Estado : el gobierno.

Es Estado  (y excluyentemente, lo es),  en tanto y en cuanto reivindique con éxito el monopolio del uso de la violencia y el de la coerción directa legítima, en la aplicación de las leyes y reglamentaciones de las que ha nacido.

La violencia (que toda esta gente conoce de sus épocas adolescentes), no es, naturalmente,  ni el único medio administrativo, ni es el medio normal de que debe valerse el Estado. Al contrario, los gobernantes usan todos los medios posibles para llevar su mandato a buen fin, sin apelar a la violencia

Sin embargo, la amenaza  y, en su caso, la aplicación directa de la coerción o violencia… es el medio específico a su disposición exclusiva y legal.    

Y cuando los demás medios fallan, es el último recurso, que no solo puede, …. sino que debe, por obligación estatuida, poner en marcha de inmediato.

Es decir, el Estado garantiza la ley, (en última ratio), con el uso de la coerción directa y de la violencia, siendo el único que la puede y la debe aplicar.

Esta dinastía de partisanos, ignora todo esto.  Ella lo ignora y dispone que todos deben ignorarlo cobrándonos sin embargo, impuestos por ello.

Antes bien, ignoran la esencia del poder,  salvo en lo crematístico, en lo cual parecen ser diestros.

Digámoslo así: Son diestros con el dinero nuestro,  y son siniestros con el de ellos. Y les importa un bledo la seguridad de nuestras propias vidas.

Más que todo lo anterior :
El poder… como concepto, es, antes que nada, eso mismo :  

Es toda oportunidad de hacer triunfar la voluntad propia, en el seno de una relación social, incluso contra la resistencia o la voluntad abierta de quien no cumpla con la ley…  o de quien se ocupe de violentarla.

Ella.. no lo sabe.

Ignora que el poder es la capacidad de hacer, producir o destruir, pero ante todo, la de influir  en la conducta o en los sentimientos de otros individuos.

Que,  en suma, el poder político, no es para nada un “absoluto”  conceptual,  sino una relación entre las personas.   Y una posibilidad de acción.
Se trata de una capacidad  (no de un acto)  sobre las personas.

Y esto es lo que ignora… esta enorme cartonera del suicidio colectivo.

Dicho mejor :  Acaso lo sepa… pero prefiere cometer, con un fin obvio, el delito de “no hacer lo que debe por mandato constitucional”, simplemente porque ha subordinado el plexo íntegro de la reglamentación nacional a su dogma.

Y su idea geométrica obsesiva montonera de la seguridad pública, es que,  tal capacidad, corresponde solamente a la derecha.          Por lo tanto, como en ese asunto decide ser “siniestra”.         Se sitúa pues,  a la siniestra.

No sólo no atiende su mandato de proveer seguridad (agraviando  así  a sus mandantes), sino que,  inversamente, fomenta, estimula y hasta diseña la inseguridad.

Campea… hoy más que nunca,… un clima de fractura social alarmante.

La violencia en la calle esta “ad portas”.

Va a tener…  esa violencia…   varios impulsores adicionales en este nuevo infierno de prohibiciones y restricciones que perviven justamente ese clima de inseguridad pública… instalados por ella y en plena vigencia.

Un infierno que…  como el de Dante Alighieri… tiene un cartel en la entrada que dice claramente :

“LASCIATE OGNI SPERANZA VOI  CH’ ENTRATE”
(“abandonad  toda esperanza los que aquí entráis”)

Es el cartel que encuentra Virgilio en su llegada a los infiernos, según la Divina Comedia del Dante

En otras palabras… si acaso alguien piensa que puede haber un reemplazo de este poder séptico… poluído  y reventado del Estado…

… que deje ya de soñar … que pierda su esperanza y que se defienda como pueda hasta que caiga esta dinastía unipersonal desde sus propias ruinas.  

 No habrá milagros… en este infierno.

                                                                       Lic. Gustavo Adolfo Bunse
                                                                           gabunse@yahoo.com

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