El jefe de Gabinete,
Jorge Capitanich, rompió en público páginas del diario Clarín porque
supuestamente contenían información falsa sobre el caso Nisman. Además de la
intolerancia que demuestra tal actitud, sienta un serio precedente. Con la
misma lógica habría que romper en público las estadísticas del Indec de los
últimos años, los fundamentos de las leyes confiscatorias aprobadas por este
gobierno y, especialmente, la pila de discursos de la señora Presidenta,
cargados de datos que no resisten el menor análisis.
Ante esta realidad,
Capitanich[1]
debería pedir disculpas y modificar su actitud antes que lo hunda una montaña
de papeles cortados.
Juan
Carlos Neves
DNI 4.995.420
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